El nivel de prealerta declarado ayer en Navarra ante las persistentes lluvias y el inicio de desbordamiento de algunos ríos se ha elevado hoy, tras declarar el Gobierno foral el nivel de emergencia Fase I por el riesgo de inundaciones, aunque el mayor riesgo estará en la ribera esta noche.

Así, y a la espera de una reunión que tendrá lugar este mediodía en Tudela, se podrían adoptar medidas preventivas de desalojo de algunas zonas del casco antiguo de la capital junto a la ribera, las que habitualmente se inundan en estos casos.

Así lo ha confirmado a los periodistas la consejera de Presidencia, Función Pública, Interior y Justicia, María José Beaumont, tras participar en una reunión Consejo Asesor de Emergencias convocada para evaluar la situación, en la que ha participado personal de diferentes departamentos del Gobierno de Navarra, representantes del Ayuntamiento de Pamplona y su Policía Municipal, y de la Delegación del Gobierno.

La directora de Protección Civil, Isabel Anaut, ha recordado que si ayer se preveía que en la localidad de Castejón el río Ebro superaría los 2.000 metros cúbicos, hoy calculan que podría superar los 2.500 metros cúbicos, momento en el que será fundamental el comportamiento de las motas o diques de contención.

En cuanto a la situación esta mañana, la directora de Protección Civil ha confirmado que los ríos "se han comportado conforme a lo previsto", con afecciones en los puntos donde se han desbordado los ríos Ega y Arakil en varias carreteras secundarios, y también con dos avenidas importantes del río Arga a su paso por Pamplona, donde esperan que comience a bajar el caudal esta mañana.

Tan solo en Tudela, como ya es habitual en su casco viejo por la salida de agua del río a través de las pluviales al estar esa zona más baja que las motas, es donde podría haber afección en un punto habitado, aunque no en viviendas sino en "parques, huertas o aparcamientos, que son puntos conocidos" por habituales.