Las tablas del antiguo mercado público encumbraban hace unos días a la sevillana María José Carrasco. La andaluza, nueva lámpara minera, tiene ante sí la oportunidad de hacer crecer su carrera tras el galardón más importante del festival internacional del Cante de las minas de La Unión.

Pocos festivales recogen más arte flamenco en unos días en los que el municipio minero de La Unión es epicentro de la información cultural nacional e internacional. La lámpara minera encumbra al mejor de un concurso que sigue siendo la esencia de un certamen que trae también en agosto a lo mejor del flamenco ya consagrado.

En esta LVIII, la máxima distinción ha recaído en María José Cararrasco. La sevillana, nacida en el seno de una familia con buenas dotes para el cante, inició su carrera desde bien pequeña. Triunfó y eso que no trajo hasta el escenario el romero que nunca olvida y tuvo que conseguirlo en La Unión. Anécdota que todavía le une más al nombre del municipio. Y es su nombre el que está ya unido a la lista de ilustres que ganaron en el antiguo mercado público de La Unión y que se han consagrado en el mundo del arte flamenco. En esta edición han sido premiados también ; Agustín Carbonell que se llevó el Bordón de oro, mientras que el filón fue para Andrés Barrios.

El desplante masculino ha sido para Hugo López y el femenino para Mónica Iglesias. Todos ellos han dado un paso importante para hacerse un hueco en un mundo que en la Unión es para todos los públicos, pero en el que los jurados son especialmente exigentes y es que el Cante de las Minas tiene multitud de cursos, exposiciones y actividades paralelas para que el público no especializado y los visitantes se integren en un arte que es fundamental para el municipio unionense.

Este año han pasado por las tablas del bello escenario del antiguo mercado público artistas consagrados como Diana Navarro, Pitingo, José Merced, María Terremoto, Vivancos, Vicente Amigo o Antonia Contreras, entre otros. También se produce en el festival una actuación especial y mágica en la mina Agrupa Vicenta, uno de los reclamos turísticos de la zona. El país condecorado este año ha sido México distinguido por ser un país implicado en la difusión del flamenco en su territorio.

El certamen no se olvida de los suyos. José Joaquín Hernández ha recibido el castillete de oro por impulsar precisamente ese galardón y sus décadas de ayuda a hacer más grande el festival unionense. En el premio al mecenazgo este año ha destacado la labor de la marca ElPozo. Ya se trabaja para que dentro de un año, el festival sea todavía mejor.