Con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el próximo 3 de diciembre, la Consejería de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social y el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad CERMI han presentado el proyecto 'Únicas', un programa con el que se trata de promover las condiciones para que las mujeres y niñas con discapacidad, así como las mujeres y madres asistentes de personas con discapacidad, disfruten plenamente y en igualdad de condiciones de todos los derechos humanos y libertades fundamentales.

En la Región de Murcia hay un total de 153.630 personas con discapacidad, de las que 78.683 mujeres (el 51 por ciento) y 74.945 hombres (el 48 por ciento), informaron fuentes de la Comunidad en una nota de prensa.

"Debido a la doble discriminación que se produce, estas mujeres se enfrentan a una situación de exclusión que puede afectar a su situación económica, laboral y social", ha apuntado la vicepresidenta y consejera de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social, Isabel Franco, quien ha puesto de manifiesto la importancia de este Plan para "remover obstáculos a través de medidas que les garanticen el ejercicio y disfrute de sus derechos y la participación plena en la vida social".

Asimismo, la consejera se ha comprometido a "continuar mejorando las políticas llevadas a cabo, ya que aunque han avanzado sensiblemente las condiciones de vida de las personas con discapacidad y han reducido las circunstancias que llevan a su exclusión, no se ha logrado aún paliar la relación entre discriminación y mujer con discapacidad".

Franco ha hecho estas declaraciones en el encuentro de mujeres con discapacidad de la Región de Murcia en el que se presentó el proyecto 'Únicas', elaborado por la Comisión de Mujeres e Igualdad CERMI, y financiado por la Consejería, con un total de 10.000 euros.

ÚNICAS

Además de defender la igualdad en estas mujeres, 'Únicas' también nace con el objetivo de promover su empoderamiento individual y colectivo, y de crear espacios de encuentro en los que potenciar la participación de estas mujeres, sobre todo en el entorno rural.

Por otro lado, se difundirán acciones de voluntariado con una doble dimensión. El primero de ellos, como instrumento para la sensibilización y la toma de conciencia de las violaciones a los derechos humanos, que siguen produciéndose actualmente y que afectan a sectores de población bien identificados, como es el caso de las mujeres y niñas con discapacidad. El segundo, para reafirmar y reconocer la tarea que desarrollan las personas voluntarias, movidas por el compromiso y la convicción de que entre todos es posible transformar la sociedad y hacerla más justa e igualitaria.

Se realizará desde una metodología participativa y activa, en sesiones de al menos dos horas de duración, para grupos reducidos e los que abordar los objetivos plantados. Estos son que las mujeres y niñas con discapacidad son "Una, y tienen las mismas oportunidades, que son innovadoras, inclusivas, comprometidas, activas, y solidarias".