Policía Nacional ha alertado este viernes, en vísperas del inicio de la campaña navideña, de la aparición de un nuevo tipo de estafa en los comercios, donde llaman los delincuentes llaman y exigen a sus empleados el pago de inmediato para recibir un gran pedido de mercancía.

En un comunicado, la Policía ha señalado que los delincuentes se adaptan al mercado, con lo que aprovechan estas fechas para intentar estafar a los comercios, con algo que es vital, la mercancía para poner a la venta.

Así, las tretas que últimamente han sido detectadas por la Policía Nacional y que están siendo perseguidas, suelen ser de personas que llaman al teléfono del establecimiento afectado, haciéndose pasar por empresa transportista.

En los casos detectados se da un valor muy elevado al contenido del pedido, a fin de tener a las víctimas pendientes de la llamada, siendo en ese momento cuando se les indica que, previo a la entrega del citado paquete, deben de hacer un ingreso de dinero en el locutorio más cercano a la tienda o se le interpondrá una multa de unos 18.000 euros a su jefe.

Durante el engaño, los estafadores incluso llegan a simular que están hablando por teléfono con el jefe del establecimiento por otra línea y les hacen creer a las víctimas que su propio jefe está al tanto de todo y está conforme con el ingreso solicitado anteriormente.

En esta modalidad delictiva, los estafadores llaman tanto al teléfono del establecimiento como al teléfono móvil del trabajador, ya que, en muchas ocasiones, en la primera llamada se les solicita el teléfono móvil de la víctima.

Con el pretexto de hablar de manera más privada mediante la línea móvil del trabajador, y mientras mantienen la conversación de manera más tranquila, otro estafador llama al fijo del establecimiento, haciéndose pasar por un responsable del servicio de paquetería, interesándose sobre si hay algún problema con la entrega del supuesto paquete.

En esta situación, las víctimas ante la supuesta veracidad de lo manifestado por tales interlocutores, unido a la presión y las repetidas amenazas referentes a las multas asociadas a la no recepción del pedido, es cuando empiezan a llevar a cabo cada una de las gestiones que los estafadores les solicitan.

Por ello, acaban realizando diferentes giros de dinero en el locutorio más cercano, con el dinero que en ese momento se encuentra en la caja o incluso el que ellos mismos aportan con la única intención de evitar esa multa tan elevada.