Un perro en casa: los beneficios para los niños de tener una mascota

El psicólogo Javier De Haro habla de las bondades de cuidar de un animalito en el caso de los más pequeños de la familia

Javier De Haro habla de los beneficios de tener un perro
00:00
Maite Fernández

Javier De Haro habla de los beneficios de tener un perro

Maite Fernández

Murcia - Publicado el

4 min lectura

¿Deberíamos dejar que nuestros hijos tengan una mascota? Para muchos padres, la respuesta inmediata es no. Sin embargo, el psicólogo Javier de Haro lo tiene claro: los beneficios de tener un perro en casa son profundos y están avalados por la ciencia.

“Muchísimos niños quieren una mascota, y muchos padres no se acercan a la idea de lo beneficioso que puede ser. Yo siempre he tenido perros, pero además de mi experiencia, hay estudios que demuestran sus beneficios, no solo para los niños, también para los adultos”, afirma De Haro. 

Uno de los aprendizajes más valiosos que una mascota puede ofrecer es la responsabilidad real. Es lo primero que se viene a la mente, porque los niños se encargarán de unas tareas clave. Para Javier, esto solo tiene sentido si se hace desde la conciencia y el compromiso:

“Los niños pueden aprender muchísimo si se responsabilizan de un animalito que siente, que sufre y que necesita cuidados. Pero para que la experiencia sea positiva, debe ser un deseo compartido por toda la familia, no un capricho puntual.”

más beneficios

“Si lo hacemos con compromiso, los beneficios son inmensos: autoestima, empatía, paciencia... Son valores que no solo desarrollará el niño, también mejorará la convivencia familiar.” 

De Haro subraya que el contacto con los perros es una poderosa técnica de relajación para los más pequeños:  “Hay estudios que demuestran que tener un perro reduce el estrés infantil incluso más que técnicas como la respiración o la visualización. Por eso, en hospitales como el de Lucía ya se aplica la perroterapia con niños ingresados. Mejora su calidad de vida de forma notable.”

En casa, ese efecto terapéutico se traslada al día a día. Pasear, acariciar o simplemente convivir con un perro se convierte en un momento de calma.

“Al principio cuesta porque vivimos pegados al móvil y a mil por hora, pero cuando cogemos el hábito de pasearlo y desconectar, ese momento se convierte en un regalo.” 

Educador y psicólogo

COPE

Educador y psicólogo

 El mejor aliado para niños tímidos  

Para los niños más retraídos, un perro puede ser el puente perfecto para abrirse al mundo. Pero no solo se cumple en el caso de los más pequeños de la casa.

“El perro facilita la conexión emocional con el niño. Es más fácil que se comuniquen, que conecten. Y cuando salen a la calle, el simple hecho de tener un perrito hace que hablen con otras personas, que se suelten.”

Además, afirma que los perros ayudan a los niños a sentirse escuchados:  “Todo el mundo que tiene perro reconoce que en algún momento ha hablado con él. Para un niño inseguro, tener alguien con quien desahogarse, aunque sea un animal, le ayuda a ganar confianza y a expresar lo que siente.” 

Javier insiste en que adoptar un perro no puede ser una decisión impulsiva. Para evitar frustraciones o abandonos, aconseja esperar un mes o dos desde que surge la idea:  “Así damos tiempo a que sea una decisión consciente. Y una vez adoptado, es fundamental implicar al niño de verdad, no solo que le dé de comer, sino que asuma pequeñas tareas y tome decisiones: elegir el comedero, la comida, la hora del paseo…”

Un niño pasea con su perro

Pixabay

Un niño pasea con su perro

Esa implicación —añade— potencia el vínculo entre el niño y el perro.  “Toda esa química que se genera entre ellos es lo que hace que aparezcan los verdaderos beneficios.”

Para Javier, los perros tienen la capacidad de enseñar algo que pocos humanos pueden transmitir: amor desinteresado.  “Siempre digo lo mismo: el perro es el único ser que te ama más a ti que a sí mismo. Y eso, para un niño, es una experiencia única.”

Recuerda con emoción la película Hachiko, donde un perro esperó durante años a su dueño fallecido.  “Ese tipo de historias son reales. Y cualquiera que tenga un perro puede contar mil anécdotas de ese amor incondicional. Eso marca a un niño de por vida.”   

Finalmente, De Haro lanza un mensaje claro para las familias que se lo están pensando:  “No uséis al perro como chantaje para que el niño se vuelva más autónomo. Tiene que demostrar cierta madurez, sí, pero sobre todo, la decisión debe ser compartida. No es una mascota solo para el niño, es un nuevo miembro de la familia. Y si todos lo queremos, darle los cuidados necesarios será más fácil y natural.”

En resumen, tener un perro no solo es una experiencia bonita, también es formativa, emocional y terapéutica. Si se hace con responsabilidad y compromiso, puede convertirse en una de las mejores decisiones familiares que se puedan tomar.

Temas relacionados

Escucha en directo

En Directo COPE CARTAGENA

COPE CARTAGENA

Programas

Último boletín

05:00H | 30 JUL 2025 | BOLETÍN

Boletines COPE
Tracking