Víctimas de 1980: "ETA dinamitó mi familia"
En víspera del día europeo de la memoria el Gobierno vasco homenajea a otras 52 víctimas de atentados sin esclarecer a las que entrega Cuadernos de Memoria y Reconocimiento

Testimonios de víctimas de ETA de 1980
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Escalofriantes los recuerdos de tres víctimas de ETA, a las que truncó sus vidas en 1980, en el acto organizado por el Gobierno vasco en Vitoria para entregar 52 nuevos Cuadernos de Memoria y Reconocimiento de atentados que no están esclarecidos completamente, mediante dossieres en los que se recoge quiénes fueron, cómo vivieron y cómo murieron, así como material gráfico proporcionado por los familiares con la ayuda de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT).
43 años después cuesta rememorar el momento del atentado, de la sinrazón terrorista que truncó la vida de cientos de familias, como la de Adeli, hermana de Joaquín Becerra, afiliado a UGT y trabajador de Tubos del Nervión asesinado en Amurrio. "Te destroza todo, te destruye todo. Lo vamos llevando, pero nunca se supera. A mi hermano le pegaron 7 tiros en los brazos de mi madre", ha recordado Adeli.
ETA en las aulas
José Ignacio Ustarán tenía 13 años y estaba en su cuarto estudiando cuando tres terroristas llamaron a la puerta, le encañonaron y se llevaron a su padre, perito industrial y militante de UCD. "Recuerdo el grito desgarrador de mi madre cuando se confirmó el asesinato de mi padre y como después de esa noche dramática comenzó una vida diferente porque los terroristas dinamitan una familia que salta por los aires", ha relatado José Ignacio.
Junto a su madre y sus hermanas se mudó a Sevilla. Hoy considera vital llevar a ETA a las aulas: "Es fundamental que la sociedad, los jóvenes, entiendan lo que pasó, que hubo asesinatos de personas que solo defendían sus ideas".
Memoria vital pero lenta
A Ruth cuando tenía 4 años ETA le robó a su padre, a Juan de Dios Noval profesor universitario y miembro de UCD, y provocó que su vida transcurriera en Palencia y no en Donosti. Reivindica la memoria pero lamenta su tardanza. "Si algo se nos tiee que agredecer a las víctimas es el respeto que hemos tenido siempre y que no hemos hecho lo que hemos sufrido nosotros. La memoria es fundamental pero ha tardado mucho", ha lamentado Ruth.
Junto a ellos tres familiares de otras 8 de las 52 víctimas que son recordadas en estos Cuadernos de Memoria los han recibido de manos de la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Nerea Melgosa, quien se ha mostrado "conmovida". "No hubo razón, ni causa política ni no política que justifique su asesinato. No la hubo, no la hay y no la habrá", ha insistido la consejera, quien ha pedido perdón en reiteradas ocasiones por que la sociedad y las instituciones "no supieron estar siempre cerca y acompañar a las víctimas cuando más lo necesitaban", ha señalado.
La primera entrega de estos cuadernos se llevó a cabo en 2021 a 86 víctimas de ETA.