El 'crimen' de Pollença: los vecinos se alzan contra una planta de baterías a tres metros de sus casas

El malestar vecinal ha crecido en Pollença ante el proyecto de construcción de una planta de baterías de litio en suelo rústico en la zona de Llenaire. El proyecto, denominado Jilguero STL, se encuentra en exposición pública y ha despertado una fuerte oposición entre los residentes, que han comenzado a organizarse en la plataforma Stop Baterías por el temor a las consecuencias medioambientales y de seguridad.

Un crimen a tres metros de casa

La preocupación principal se centra en la magnitud de la instalación, que consta de 16 contenedores de 35 toneladas cada uno cargados de litio. Los vecinos alertan sobre el peligro de explosiones y la generación de gases tóxicos, basándose en accidentes similares ocurridos en otras partes del mundo. Para los afectados, que denuncian la falta de idoneidad del emplazamiento, "es un crimen, esto para para nosotros es un crimen".

La proximidad de la planta a las viviendas, con algunas a tan solo tres metros de la finca, es uno de los puntos más críticos. Además, a 80 metros se encuentra un torrente que podría llevar cualquier fuga directamente al mar, contaminando acuíferos, pozos y venas de agua. Parte de la parcela de 3.000 metros cuadrados está catalogada como zona inundable, lo que agrava el riesgo.

Es un crimen, esto para para nosotros es un crimen"

José Manuel

Responsable de la plataforma Stop Baterías

Movilizaciones y alegaciones

Los vecinos, que se enteraron del proyecto por la prensa, ya han realizado una concentración en la plaza de Pollença. Cuentan con el apoyo del Ayuntamiento, que presentará sus propias alegaciones contra el proyecto, cuyo plazo finaliza el 12 de noviembre. Por su parte, la empresa promotora se reunió con el alcalde y asociaciones para defender la seguridad de la instalación, una visión que choca frontalmente con la de los residentes.

La plataforma Stop Baterías tiene previsto instalar dos stands informativos en la Feria de Pollença para seguir concienciando a la población. Su objetivo es agotar todas las vías posibles para detener el proyecto, pidiendo al Consell y al Govern Balear que revisen la ubicación por considerarla un "crimen".

Un fuego que los bomberos no pueden apagar

Uno de los mayores temores es la posibilidad de un incendio, ya que el fuego de litio no se puede extinguir con agua. Según alertan los afectados, "no hay bombero en Mallorca que pare ese fuego", y habría que dejar que ardiera durante días hasta que se consumiera, generando nubes tóxicas peligrosas para las personas, la fauna y el medio ambiente. "Es una aberración", sentencian desde la plataforma vecinal.

No hay bombero en Mallorca que pare ese fuego"

José Manuel

Responsable de la plataforma Stop Baterías