David Carro: "Inevitablemente la marca NBA va a seguir vinculada a Antoni Daimiel en España"

Ha comenzado la NBA, una nueva temporada de expectativas, movimiento de grandes estrellas, equipos multinacionales que forman parte de la liga más universal, también la más potente económicamente hablando.

Genera filias y fobias a partes casi iguales, desde los enamorados de una liga que reúne a los mejores jugadores, del tirón ente los jóvenes a base de mejores jugadas y canastas increíbles de jugadores de una gran calidad, a los detractores que ven más marketing que baloncesto, un juego demasiado individualista y en ocasiones con falta de rigor defensivo. Como suele pasar, no todo es  así pero hay parte de verdad en todo.

 Una competición que reúne mucho talento tanto estadounidense como mundial, pero también demasiados partidos, demasiados minutos, demasiados partidos intrascendentes, una liga apasionante porque nunca tiene claro favorito, porque es la única liga en la que un equipo puede pasar de ser campeón a la miseria y viceversa, la liga de lo imprevisible. 

Pero también una liga que cuesta seguir por los horarios, partidos exageradamente largos y una cultura distinta a la nuestra más basada en la experiencia del espectáculo que en la pertenencia de equipo como ocurre en nuestro baloncesto. Una liga que tiene un serio problema desde hace muchos años con uno de sus antaño mejores reclamos, el All Star, ahora convertido en una feria sin sentido. 

La NBA no tiene nunca una apuesta segura, por más que los entendidos se afanen y se rebanen los sesos para dar sus pronósticos. Los Oklahoma City Thunder empiezan el curso recibiendo el anillo de campeones por primera vez en su historia, el ex equipo del ahora retirado Álex Abrines, de la mano de Gilgeous-Alexander, mientras Boston Celtics siempre parte como favorito pese a la lesión de uno de sus estiletes, Jayson Tatum.

Denver, Warriors, siempre hay que contar con ellos, ahora también Houston con Kevin Durant , los Lakers siempre arrancan con máxima expectativas por su historia, pero también por quizá el último baile de Lebron James y el fenómeno Luka Doncic con su transformación física.

¿Qué opina de todo esto David Carro? hablamos con el agente mallorquín, uno de los representantes de jugadores más relevantes del baloncesto europeo, antes periodista de largo recorrido en la cobertura de la NBA y a quien acudimos para buscar su visión esta liga.

Carro ve un pronóstico abierto esta temporada pero en algo se muestra mucho más convencido y sin dudar, en que la marca NBA forzosamente seguirá vinculada al periodista Antoni Daimiel, a quien conoce desde hace casi 30 años, los años que lleva el periodista analizando la NBA.

 Aunque la liga ha cambiado de plataforma en España y ahora el operador es Amazon y DAZN, David Carro ve inevitable que Daimiel siga contando y analizando con su personal estilo, mesura, humor y preparación, mucha preparación en información y datos, la considerada mejor liga del mundo. 

En esta página puedes escuchar la conversación con David Carro, quien sigue predicando con el ejemplo y desarrolla su pasión por el baloncesto a sus 46 años, como jugador en activo en el Sant Josep Obrer, el equipo que tanto talento ha aportado al baloncesto balear, con los hermanos Rudy y Marta Fernández, en este caso para ayudar a que destaquen otros "porque ahora es su momento, no el mío", dice el veterano jugador.