Finalmente no prosperó la cuestión de confianza presentada en el Concello de Ourense.

Los votos en contra del PSOE, BNG y de los tres concejales no adscritos que pertenecieron a Democracia Ourensana impidieron aprobar a Jácome la modificación presupuestaria de 62,6 millones de euros.

Ahora se abre el plazo de un mes para que se presente una moción de censura con un candidato alternativo. En el caso de que no se presente, o si no prospera, quedaría aprobada la propuesta.

El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, no entendió la postura del PP, que se abstuvo en la votación.

Desde el grupo de no adscritos, Miguel Caride, como hiciera en el pleno de la semana pasada, insistió en que la utilización de la práctica totalidad del remanente del Concello para la modificación presupuestaria podría en peligro el ahorro del Ayuntamiento.

Luis Seara, del BNG, le dijo a Jácome que no era de fiar y, por eso, nunca tendrían su confianza.

José Araújo, de Ciudadanos, reconoció su mala relación con el alcalde, aseguró que Jácome no le daba confianza, pero se negó a propiciar un bloqueo de la ciudad.

Coincidió el PP con Ciudadanos en no querer ser obstáculo para el desarrollo de la ciudad. Flora Moure culpó al PSOE en su intención de bloquear todos los proyectos de avances para Ourense.

Y, desde el PSOE, su portavoz, Rafael Rodríguez Villarino, respondió que era el PP el que bloqueaba el cambio en la ciudad propiciando que Jácome siguiera siendo alcalde.

Jácome no entendió la postura del PP, que se abstuvo en la votación.