El alcalde de O Carballiño, Francisco Fumega, señaló que la situación es “preocupante” al “no ver una salida a corto plazo” con la pandemia del COVID-19. Con todo, manifestó que se produjo un “descenso de dos casos” en las últimas 24 horas tras semanas de aumento continuo. De hecho, Francisco Fumega recalcó que es el “primer día de bajada desde la virulencia del coronavirus en O Carballiño” pero “no se pueden echar las campanas al vuelo hasta que tengamos una serie continua que lleve a remitir”.

En una entrevista en Cope Ourense, el regidor señaló que en este primer día de cierre perimetral de O Carballiño, O Irixo y Boborás “hay controles policiales en las entradas y salidas” pero “no hay una gran movilidad porque las medidas de la fase 3 marcaron la vida social de O Carballiño” con las restricciones en bares y hostelería y así “una parte importante de ciudadanos ya salía lo indispensable”.

El alcalde de O Carballiño apeló a la “responsabilidad individual y social” ante esta difícil situación y añadió que “el sacrificio de estos días dará resultados” ya que “entre todos, si nos ponemos en serio, lo conseguimos”.