Continúa en los juzgados de Ourense el juicio a seis hombres que protagonizaron una pelea a tiros a las puertas del Hospital de la ciudad en mayo del año 2016.

Pertenecen a dos familias que actualmente tienen buena relación, pero que cuando se produjo el incidente estaban enfrentadas a causa de una relación sentimental que una de ellas no aprobaba. "Fue un malentendido", afirmaban estos días en sede judicial.

Dos de los imputados reconocieron este lunes haber efectuado disparos pero "por temor", y en la jornada de hoy los dos hombres que resultaron heridos en la refriega negaron que sus agresores tuviesen intención de matarlos. "Si quisieran matarnos, a la distancia que estaban lo hubieran hecho", explicaban.

También ha declarado un vigilante de seguridad que supuestamente impidió que las consecuencias del enfrentamiento fuesen más graves, pero los acusados afirman no haberlo visto en el lugar de la pelea.

La petición de la fiscalía es de penas de entre 10 y 13 años para cada uno. Además de las dos personas que resultaron heridas leves como consecuencia de los disparos los proyectiles acabaron dañando también la entrada del Hospital de Ourense, así como varios vehículos.