Musa juega a fútbol en Lugo: toques de balón, ovaciones y pura magia antes del partido
La ciudad lucense vivió una tarde mágica con la visita del Real Madrid de baloncesto y su icono más querido, Dzanan Musa, quien volvió a dejar destellos de talento, cariño… ¡y fútbol!

Musa e Ndiaye, jugando al fútbol
Lugo - Publicado el - Actualizado
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Musa, el virtuoso del balón… con el pie La tarde del domingo se convirtió en una fiesta en Lugo. Con el Río Breogán ya salvado, el Pazo dos Deportes se llenó para recibir al Real Madrid, y especialmente a un jugador que aquí ya es leyenda: Dzanan Musa. El bosnio regresó a la ciudad que lo lanzó al estrellato, y lo hizo acompañado de todos los ‘tanques’ del club blanco, pero también con una exhibición inesperada antes del salto inicial.
Antes del comienzo del partido, Musa y su compañero Ndiaye improvisaron un calentamiento más propio de un entrenamiento de fútbol: toques de balón, regates con ambas piernas e incluso intentos de marcar de cabeza en las canastas. Una escena que desató los aplausos del público, que no solo admira a Musa como baloncestista, sino también como persona.
Una relación especial con Lugo
Cada visita de Musa a Lugo se convierte en una explosión de reconocimiento y agradecimiento mutuo. El jugador ya no sabe cómo corresponder a tanto cariño, aunque quizá por eso cada gesto suyo en la pista se interprete como un mensaje no verbal de conexión con la afición.

Aplausos a Musa desde el minuto uno
Pese a la modestia de la ciudad en comparación con otras capitales europeas o norteamericanas del baloncesto, la conexión entre Lugo y sus ídolos es única. "Lugo es Lugo", se suele decir, y aquí se quiere profundamente a quien deja huella. Musa es ya parte de esa historia, como en su día lo fueron Antonio Sacedo, José Manuel Cabezudo, que se quedaron a vivir en Lugo o Jimmy Wright, cuyos lazos con la ciudad perduran incluso a través de su hijo nacido en la capital lucense, Devin Wright .
¿Un futuro en Lugo?
Aunque su futuro profesional podría estar lejos del Real Madrid —los rumores lo sitúan en destinos exóticos como Dubái, donde los petrodólares mandan—, lo cierto es que Musa se siente cada vez más cerca de Lugo. Este mismo domingo confesó su intención de comprarse una casa en la ciudad para pasar temporadas aquí, un gesto más de su vínculo con la afición.
Incluso este lunes, tras haber sufrido un esguince en el partido, Musa fue visto visitando al personal del Hospital Universitario Lucus Augusti, donde fue tratado en abril de 2022 por una fractura de tráquea que sufrió vistiendo la camiseta celeste del Breogán. Un recuerdo doloroso, pero también símbolo del afecto que ha recibido desde entonces.
Musa cojeaba visiblemente, aunque sin señales de lesión grave. Pero lo que quedó claro una vez más es que entre él y Lugo hay algo más que baloncesto. Hay cariño, historia… y hasta fútbol.