El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, inauguró este martes el primer complejo de turismo rural vegano de Galicia, en el pueblo de O Viso, en el municipio de Ourol, una aldea que quedó abandonada hace más de treinta años y que el proyecto de la promotora, Hardly Pascale, ha devuelto a la vida.

Según la empresa que está detrás de este proyecto, la arquitectura de los edificios que forman la aldea de O Viso tiene alrededor de doscientos años. Para recuperar el pueblo, la promotora trabajó con la “premisa de la sostenibilidad ecológica”, de modo que en las obras de rehabilitación -que comenzaron en 2018- se respetaron los materiales tradicionales de la zona, como la piedra y la pizarra.

Además, la recuperación de la aldea, que contaba entre las edificaciones con una antigua escuela y una casa de maestros, se llevó a cabo “de la manera más respetuosa con el conjunto original de los edificios”.

SIETE INMUEBLES Y 31 PLAZAS

En la actualidad, el Viso Ecovillage está integrado por siete inmuebles y ofrecerá 31 plazas de alojamiento, además de poner a disposición de sus clientes un restaurante vegano, con una carta 100% vegetal.

Durante su intervención, Alfonso Rueda destacó el apoyo de la Xunta al turismo como “uno de los motores para dinamizar la economía y el empleo rural”.

En ese sentido, hizo alusión a la línea de ayudas para la mejora de infraestructuras de establecimientos turísticos -dotada con dos millones de euros-, a las aportaciones a los ayuntamientos de hasta 10.000 habitantes para la recuperación de recursos turísticos, a los acuerdos con la Federación Gallega de Turismo Rural para impulsar las reservas online, a los planes de Sostenibilidad Turística en Destino o a la creación de Geodestinos

Además, también se refirió al programa Leader, al que el Gobierno gallego destinó 71,5 millones de euros entre 2014 y 2020 para apoyar casi 1.500 proyectos, que consolidaron o generaron más de 4.000 empleos.

UNA SEGUNDA VIDA

Durante la inauguración del nuevo complejo turístico, Rueda también le agradeció a la promotora que apostase por un proyecto que “supone devolverle la vida a una aldea que llevaba abandonada más de 30 años”.

Aunque el turismo rural y sostenible está en auge y Galicia ya es un destino de referencia, recordó Rueda, “es preciso seguir impulsando iniciativas innovadoras para revitalizar nuestras aldeas”.

En ese sentido, afirmó que “Galicia tiene un verdadero potencial en sus aldeas, tiene naturaleza, paisajes y rincones y establecimientos turísticos de excelencia”, además de incidir en que “de los 31 alojamientos rurales que tienen el distintivo Q de calidad Turística en España, el 61 % están en nuestra Comunidad”.

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Por último, Rueda hizo hincapié en las buenas previsiones que se esperan de cara al verano en cuanto a la ocupación hotelera, con un promedio de entre el 75 y el 90% entre julio y agosto, después de que en los primeros cinco meses del año se hayan registrado 1,7 millones de viajeros alojados y 159.000 compostelas entregadas.