La cantera de Lugo en las categorías base de Loitas Olímpicas: un futuro prometedor en la Copa Diputación de Ourense

El equipo lucense alcanzó un meritorio sexto puesto en esta primera competición de la temporada, que no solo puso de manifiesto el nivel deportivo de los jóvenes luchadores, sino también el espíritu de compañerismo que caracteriza a este grupo. Desde las gradas hasta los tapices, se respiró un ambiente deportivo inmejorable, reflejo del trabajo en equipo y de la pasión por este deporte.

Participación gallega en una jornada llena de emoción

La Copa Diputación de Ourense contó con la participación de destacados clubes de Galicia, lo que contribuyó a hacer aún más vibrante la jornada. Entre los equipos que compitieron se encontraban el Club Kuzushi de Vigo, el Club Ciudad de Vigo, el Club El Castro de Vigo, el Club A Cambadela de A Estrada, el Club Keltoi de Vila de Cruces, el Club Sport Times de Crecente y el Club Atila de Ourense, todos con el mismo objetivo de fomentar la práctica de la lucha olímpica entre los más jóvenes.

Competición por equipos mixtos y un enfoque inclusivo 

En esta ocasión, la competición se desarrolló bajo un formato de equipos mixtos, con una reglamentación adaptada para asegurar la participación de todos los deportistas, independientemente de su nivel técnico. El énfasis no estuvo tanto en la calidad individual, sino en el volumen de participación, buscando que cada luchador, sin importar su experiencia, pudiera disfrutar de una jornada de lucha en un ambiente inclusivo y de camaradería.

Una jornada de éxito y organización ejemplar

El evento fue un éxito rotundo, tanto en lo organizativo como en la participación. El Club Atila de Ourense, junto con la Federación Galega de Loita e D.A., fueron los encargados de llevar a cabo la excelente gestión del torneo, lo que permitió que todo se desarrollara de manera fluida y profesional.

En definitiva, la participación del Club de Loita Lugo en la Copa Diputación de Ourense no solo deja claro el buen estado de salud de la base de la lucha olímpica en Lugo, sino también el compromiso de los clubes gallegos por seguir formando a futuras generaciones de luchadores, manteniendo vivo el espíritu de este deporte y fomentando el compañerismo entre los más jóvenes.