Carlos Negreira defiende la obra que peatonalizó el centro de A Coruña: "Tocaba arriesgar"
Reconoce que la obra generó tensiones. "Si la hubiéramos acabado seis meses antes, probablemente la hubiera entendido mucho mejor toda la gente, incluso a la hora de revalidar o no el mandato"

Coruña - Publicado el
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Este lunes se cumplieron diez años de la apertura al tráfico del Túnel de la Marina, una infraestructura que en su día generó controversia, pero que hoy se reconoce como una de las grandes transformaciones urbanas de A Coruña. Carlos Negreira, entonces alcalde de la ciudad, rememora en una entrevista en COPE Coruña el momento como uno de los más ilusionantes de su trayectoria política.
"Fue una obra muy compleja, pero también muy necesaria", afirma Negreira, recordando que en 2011 la zona estaba completamente paralizada. “Lo que había era una gran piscina. Estaba paralizada esa obra”. La iniciativa, según relata, fue fruto de un esfuerzo conjunto entre el Ayuntamiento, la Xunta de Galicia y el Ministerio de Fomento. "Hay que agradecer especialmente a Alberto Núñez Feijóo, que desde el primer momento apoyó el proyecto", destaca.
PÉRDIDA DE LA MAYORÍA ABSOLUTA
Negreira reconoce que la obra generó tensiones y no fue del todo comprendida en su momento. "Si la hubiéramos acabado seis meses antes, probablemente la hubiera entendido mucho mejor toda la gente, incluso a la hora de revalidar o no el mandato que tuvimos de cuatro años, de mayoría absoluta", reflexiona. Sin embargo, se muestra "muy satisfecho" por haber culminado la obra, junto la de la Tercera Ronda o las escuelas infantiles. “Tocaba arriesgar", subraya. "Los políticos tienen que anteponer los intereses ciudadanos a los partidistas”, subraya.
Además del túnel de la Marina y del Parrote, su mandato impulsó la renovación de toda la Marina, una decisión que entonces se consideró ambiciosa. “Muchos nos dijeron que con el Parrote acabado va a quedar todo muy bien y no nos vamos a meter en La Marina, que seguramente será muy complejo. Y dije, sí, pero si no lo hacemos ahora, probablemente no se haga”, comenta.
El proyecto inicial también contemplaba la reforma hasta la Lonja, con nuevas zonas verdes y la eliminación del hotel NH, algo que quedó pendiente. Ahí se había proyectado una "gran zona de parking, el abrir todos los jardines al mar". "Hubiéramos cambiado la ciudad en la siguiente legislatura, pero, bueno, supongo que ahora con la fachada marítima se podrán hacer más cosas", añade.
Al ser preguntado si aquella obra influyó en la pérdida del gobierno municipal por el PP en 2015, Negreira apunta a un contexto político más amplio: "Eran otras circunstancias, estaba el 15M que se articuló a través de las Mareas y que después de dos legislaturas no queda ni rastro porque era un movimiento que aprovechó un momento muy difícil económicamente", señala.
Aunque apartado de la política, Negreira asegura estar "muy agradecido a todos los que hicieron posible su alcaldía. No hay nada como ser alcalde de tu ciudad. Me consuela disfrutar ya con mis nietos de esa Marina y de ese Parrote".
vida tras la salida de la política
A pesar de haberse ido de la política no esconde su pasión por la gestión pública. "La política es un gusanillo, a veces difícil de olvidar". Tras su salida, se trasladó a Madrid donde montó una empresa que se dedica fundamentalmente a la logística y que "me llena muchísimo". Aún así, reconoce, "a veces me encanta hablar de política o me encanta estar con buenos y viejos amigos de la política y hablar sobre lo que debe ser el bien común para todos. Porque ser político es una de las actividades más maravillosas del ser humano, ocuparse de todo lo que nos afecta a todos e intentar hacer lo mejor posible. Yo me siento muy recompensado por la ciudad y por todos los coruñeses", concluye.

Carlos Negreira en entrevista en COPE Coruña tras anunciar que dejaba la política