Abel Bautista exige a Gallardo que deje su escaño: “Es absolutamente incompatible estar en la Asamblea y en el banquillo”
El consejero de Presidencia califica de “bochorno” la situación del líder del PSOE de Extremadura y denuncia irregularidades del hermano del presidente

Abel Bautista, consejero de presidencia
Mérida - Publicado el
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La política extremeña vive horas convulsas tras conocerse que David Sánchez, hermano del presidente del Gobierno, y Miguel Ángel Gallardo, secretario general del PSOE de Extremadura y líder de la oposición, tendrán que sentarse en el banquillo de los acusados.
La Audiencia Provincial de Badajoz ha decidido que existen indicios suficientes sobre un posible delito de prevaricación y tráfico de influencias en la contratación de Sánchez en la Diputación de Badajoz hace siete años. Los jueces descartan archivar el caso y remarcan que será en el juicio donde se determinará si hay o no responsabilidades penales.
“Absolutamente incompatible”
El consejero de Presidencia de la Junta de Extremadura, Abel Bautista, fue rotundo en su valoración: “Es absolutamente incompatible estar sentado en un escaño en la Asamblea de Extremadura y estar sentado en el banquillo de los acusados”.
Bautista pidió públicamente a Gallardo que renuncie a su acta de diputado, apelando al respeto a las instituciones y a los extremeños.
Un “bochorno” para Extremadura
El consejero reconoció que la situación “avergüenza” y “abochorna” al Gobierno regional, a militantes socialistas y a los ciudadanos. Subrayó que este caso entorpece la imagen positiva de Extremadura, que atraviesa un momento de crecimiento económico y social.
Además, acusó a Gallardo de haber intentado utilizar las instituciones para aforarse y obtener ventajas judiciales, algo que calificó de “inadmisible”.
La sombra sobre el hermano del presidente
Bautista cargó también contra David Sánchez, al que acusó de haber cobrado dinero público sin trabajar en Extremadura y de simular residir en la Moncloa para tributar en Portugal.
“Es un escándalo que nos preocupa y nos avergüenza”, afirmó, insinuando que Sánchez no pudo actuar solo, sino “con la aquiescencia del expresidente de la Diputación y del propio presidente del Gobierno”.