Les Corts Valencianes han aprobado este jueves la ley de Residuos y suelos contaminados para el fomento de la economía circular en la Comunitat Valenciana, que introduce la obligación de bares y restaurantes de servir agua del grifo gratis a los clientes que lo soliciten.

La norma, que ha sufrido numerosos retrasos y cambios durante su tramitación, derivados, principalmente, de la aprobación de la ley estatal, ha salido adelante con los votos a favor de los grupos del Botànic (PSPV, Compromís y Unides Podem), la abstención de Ciudadanos, y los votos en contra del PP y Vox.

La nueva ley incluye también la devolución y retorno de envases con un incentivo económico para las botellas de plástico de bebidas con una capacidad inferior a tres litros; la implantación de sistemas de recogida puerta a puerta, y la reducción de los residuos dispersos en el entorno natural, agrario o marino.

Contempla la creación de la Agencia Valenciana de Residuos, que contará con un consejo de participación donde se incluirá a la sociedad civil y a los agentes económicos, y será competente en guiar a los municipios, y realizar un seguimiento de las actuaciones, gestionar fondos o realizar campañas de educación ambiental.

La nueva ley incorpora el fomento del tejido empresarial basado en la reparación y reutilización y el comercio de productos de segunda mano, reutilizados o reparados, así como el acceso directo de la ciudadanía a productos y materiales reutilizables en los ecoparques.

También prevé la lucha contra el derroche alimentario y el fomento de su donación, y la compra pública sostenible para la reducción de residuos en las Administraciones Públicas.

En el pleno, se han aprobado varias enmiendas pactadas con la oposición, entre ellas, algunas de Ciudadanos que introducen cuatro nuevos artículos para mejorar la gestión del tratamiento de residuos en diferentes ámbitos.

En concreto, se trata de cuatro artículos para la mejora del tratamiento y gestión de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, de vehículos al final de su vida útil, de residuos sólidos en el medio marino, y de residuos textiles.

También se ha alcanzado un acuerdo con el PP para, entre otras cosas, permitir la quema controlada de restos agrícolas.