Cuando llega el verano y el calor empieza a apretar, no hay nada más satisfactorio que un buen día de playa junto a la familia o amigos. Por ello os presentamos las mejores calas de la Comunidad Valenciana para poder disfrutar durante el mes de agosto. Desde calas de arena fina hasta algunas llenas de pequeñas piedras redondas, la Comunitat tiene algunos de los mejores rincones costeros que no deberías dejar de visitar.

Cala del Portitxol (Jávea)

Situada entre el Cap Prim y el Cap Negre en Jávea y plagada de las típicas barracas de pescadores de la zona, esta cala también conocida como la Cala de la Barraca, es uno de los lugares de obligada visita de la costa alicantina. Es una playa rústica de grava y roca con una longitud de 900 metros y con diferentes servicios que te ayudarán a vivir una experiencia inmejorable. Cuenta con vigilancia y salvamento marítimo y también podrás alquilar hamacas, sombrillas, canoas y kayaks. Además, los bañistan también disponen de WC gratuitos.

Cala del Moraig (Benitatxell)

Escondida tras el lujoso complejo de las Cumbres del Sol, esta cala de grava y agua tranparente es otro de los lugares imprescindibles de esta lista. Tiene una condiciones excelentes para disfrutar de un día de buceo y su preciosa Cova dels Arcs con sus maravillosas vistas no te dejará indiferente.

Cala de la Granadella (Jávea)

Esta es otra de las calas más conocidas de la zona y otra de las cásicas que no te puedes perder. Sus aguas cristalinas son geniales para practicar el submarinismo. Esta cala también cuenta con una ruta con la que disfrutar de unas maravillosas vistas que finaliza en el Castillo de la Granadella. Esta playa de grava está considerada por méritos propios como una de las mejores de todo el país y goza de la bandera azul que acredita la calidad de las playas.

La Renegà (Oropesa del Mar)

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Este conjunto de calas esculpida de forma natural por la acción del mar y del viento es uno de los lugares más bonitos de la costa castellonense y de obligada visita para los amantes del snorkel puesto que su fondo marino no deja indiferente a nadie. Rodeada de pinos, la zona es genial para todo tipos de visitantes y para disfrutar de un buen día en la naturaleza.

Cala Ferris (Torrevieja)

Rodeada de palmeras y pequeñas dunas con aguas cristalinas, este lugar ofrece la oportunidad de disfrutar de un tranquilo baño entre los sonidos de los pájaros y el ir y venir del mar. Es también un excelente lugar para bucear: te asombrarás con las praderas de posidonia y la cantidad de peces que habitan en este ecosistema.

Cala del Tio Ximo (Benidorm)

Si lo que buscas es huir del bullicio y la masificación de la zona de Benidorm, esta es tu cala. Situada al norte de esta localidad y combinando arena fina con la típica roca del litoral alicantino, esta pequeña cala es un lugar ideal para practicar snorkel gracias a sus aguas cristalinas y sus preciosos fondos rocosos.

Cala Pebret (Peñíscola)

Esta cala situada a los pies de la Sierra de Irta, es genial para disfrutar de un día con la familia o tras una buena ruta en bici por la zona. Su tranquilidad es uno de los aspectos que más se valora y también es un lugar espectacular para avistar diferentes tipos de aves pues es una zona protegida.

Cala Los Tiestos (Benitatxell)

Este precioso espacio se encuentra a escasos metros de la Cala del Moraig y es una cala dedicada a los más atrevidos, pues la bajada a dicha cala tiene tres tramos en los que hay que descolgarse por diversas cuerdas y es necesario cierta agilidad tanto para bajar como para subir. El camino hacia la cala es entretenido pero merece la pena el esfuerzo para poder disfrutar de uno de los rincones más bonitos de la costa alicantina.

Cala de la Foradada (Vinaròs)

Rodeada de pequeños acantilados, esta cala con forma de agujero natural en la roca cuenta con unas vistas maravillosas del mar Mediterráneo y con un fondo marino que lo hace un lugar ideal para la práctica del snorkel. Tiene un buen acceso gracias a unas escaleras que descienden a ella y se recomienda el uso de cangrejeras por la rugosidad de las rocas.

Cala Pinets (Benissa)

De carácter salvaje y recóndito, esta pequeña cala de piedras de canto rodado es perfecta para desconectar y genial para ir con niños pues desde ella se pueden realizar diversas excursiones pegadas a la costa. Su fondo marino es uno de sus grandes atractivos dejándose ver fragmentos de posidonia y diferentes tipos de anémonas.