La Comunitat Valenciana logra el mayor descenso de suicidios desde 2011 gracias a la inversión en salud mental
El Día Mundial para la Prevención del Suicidio se celebra con una reducción del 11,8% en la tasa de casos, por encima de la media nacional

Bartolmé Pérez explica la buena tendencia de los datos en la Comunidad Valenciana
Valencia - Publicado el
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La Comunitat Valenciana se ha convertido este año en referente nacional en la lucha contra el suicidio. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2024 la región registró un descenso del 11,8% en la tasa de suicidios, el mejor resultado desde 2011 y claramente por encima de la media española, que se situó en un 7,6%. Solo Madrid y Cataluña lograron resultados más favorables en el comparativo interanual.
De este modo, la Comunitat alcanza de nuevo la media nacional de 7,9 casos por cada 100.000 habitantes, un valor que no se veía desde 2017. La mejora llega en un contexto en el que el suicidio sigue siendo la principal causa de muerte entre los menores de 30 años, representando el 20,9% de los fallecimientos en este grupo. Además, los hombres continúan siendo los más afectados, con 7 de cada 10 casos.
La clave: más profesionales y atención temprana
El cambio de tendencia no es fruto de la casualidad. La Conselleria de Sanidad ha impulsado un incremento histórico de recursos humanos en salud mental. Solo en 2024 se incorporaron 200 nuevos profesionales y en 2025 ya se han creado 431 plazas adicionales, lo que supone un 72% más que en las dos últimas legislaturas juntas.
Esto ha permitido mejorar la accesibilidad, reducir listas de espera y desplegar equipos en situaciones críticas, como la reciente DANA. “Donde cabría esperar un empeoramiento de la salud mental, se consiguió reducir la incidencia de casos graves gracias al despliegue inmediato de los servicios”, explicó en Herrera en COPE Comunidad Valenciana, Bartolomé Pérez, director general de Salud Mental y Adicciones.
El propio Pérez recalcó que “invertir en salud mental salva vidas” y que el esfuerzo realizado “empieza a dar el resultado de salvar vidas, claramente”. Según detalló, en 2023 se contabilizaron 468 fallecidos por suicidio en la Comunitat, mientras que en 2024 la cifra bajó a 421 personas, un dato significativo teniendo en cuenta además la variación poblacional.
El impacto en los jóvenes: Unidades de Detección Precoz
Uno de los proyectos más destacados ha sido la creación de Unidades de Detección Precoz en centros escolares, integradas por 56 psicólogos que ya han intervenido en 178 casos de estudiantes con ideas o intentos de suicidio en apenas tres meses. La actuación rápida ha evitado la progresión hacia situaciones de mayor riesgo.
“El trabajo de estos equipos es fundamental para llegar a tiempo, especialmente en edades donde el suicidio es la primera causa de muerte”, señaló Pérez. Además, este curso se ha puesto en marcha un Programa Escolar para la Promoción del Bienestar Emocional y la Prevención de Adicciones, en colaboración con la Conselleria de Educación.
Un descenso que se refleja en las urgencias
La buena tendencia también se confirma en las urgencias hospitalarias por autolesiones, que entre enero y agosto de 2025 se redujeron en un 7,4% respecto al año anterior. Es la primera vez que se registra un descenso desde la pandemia de la COVID-19.
Según Pérez, este dato es un indicador inmediato de que las medidas aplicadas funcionan: “La tendencia de urgencias es un buen predictor, y nos dice que la cosa va bien. No vamos a parar, porque todavía hay mucho trabajo por hacer”.
Testimonios que ponen rostro al problema
El suicidio no solo golpea a las estadísticas, también deja huella en familias y entornos enteros. En los micrófonos de COPE, Iván Espejo de la Fuente relató su experiencia tras sobrevivir a un intento: “Me cansé, me cansé de sufrir yo y de hacer sufrir a la gente. Acabé tirándome a un tren. He perdido las piernas, ahora soy doble amputado, pero intento tirar para adelante”.
Su historia refleja la crudeza del suicidio, pero también la posibilidad de seguir viviendo con apoyo. Casos como el suyo justifican la necesidad de seguir invirtiendo en prevención, atención temprana y sensibilización social.
Un mensaje en el Día Mundial para la Prevención del Suicidio
Cada 10 de septiembre, la OMS recuerda la importancia de hablar de salud mental y de romper tabúes. Este año, la Comunitat Valenciana llega a la fecha con un mensaje esperanzador: la inversión en recursos y la respuesta coordinada de los profesionales empiezan a dar resultados.
Como concluye Bartolomé Pérez: “Esto no es matemático, pero si seguimos por este camino, con más personal, motivación y programas de prevención, podremos mantener la tendencia. Somos conscientes de que es un trabajo de años, pero los datos nos dicen que vamos bien”.
Un trabajo a largo plazo, una estrategia que combina prevención escolar, refuerzo hospitalario y despliegue de recursos en emergencias, y un objetivo claro: salvar vidas.