El valencianismo está necesitado de buenas noticias. Desde hace tiempo, mucho de lo que rodea a las informaciones del club, sea social o deportivo, son en negativo. El lío del nuevo estadio que no arranca, la venta de Guedes, la salida de Soler casi sobre la bocina del mercado. Hay una sensación mayoritaria entre la afición que apunta a la apocalipsis del club, a la desamortización sin apuntar a ningún objetivo mínimamente ilusionante. Gattuso ha sido una bocanada gigante de aire fresco. El técnico contagia su espíritu competitivo. Su carácter positivo y ambicioso, hace levantar el ánimo del aficionado de Mestalla, más allá de los triunfos o las derrotas.

Pero la noticia que esperaba hace mucho el valencianista, está muy cerca de confirmarse. Ayer Deportes COPE Valencia avanzó que la firma de la renovación del capitán, José Luis Gayà, para las próximas cinco temporadas, está muy cerca de cerrarse. Ambas partes negocian los famosos flecos de toda operación. Cláusulas, bonus, etc…pero lo mollar del contrato está encauzado y esto pasa por, los años de contrato y el salario del jugador que, como se comprometió Peter Lim desde un inicio, será el más alto del vestuario.

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?? Se acerca el acuerdo final @jose_gaya ?? @valenciacf

?? El jugador firmará por cinco temporadas

?? Aquí, los detalles @COPEhttps://t.co/1iiDusAypw

— Deportes COPE Valencia (@DepCOPEValencia) September 23, 2022

Tan esperada como ilusionante, la noticia COPE no tardó en tener su eco en las redes sociales. Aluvión de reacciones y algunas propuestas estrambóticas para celebrar la que puede ser, la noticia del año en el Valencia CF, la renovación de su capitán.

“Eterno”, “Leyenda”, “Bandera”, “Escudo y murciélago”, “One Club Man”, son algunos calificativos con los que los valencianistas han querido etiquetar el gesto de un Gayà que, aún en tiempos de penurias y rechazando propuestas importantes de clubes Champions, hace honor a su valencianismo de cuna y acepta la oferta de su club para convertirse en el sempiterno capitán.

Si los adjetivos se multiplican en las redes para calificar la buena noticia, más rocambolescas son algunas peticiones de los aficionados a través de las redes sociales. Desde tatuarse el cuerpo con el nombre de Gayà, al de bautizar a su bebé con el nombre de José Luis. Otros piden que el nuevo estadio lleve su nombre, son muchos los que reclaman, no una lona, una estatua en la Plaza de la Afición con la figura del lateral de Pedreguer.

Más allá de lo anecdótico, es apabullante y unánime el sentir emocionado y real del valencianismo de ver que su capitán, decide seguir capitaneando el barco, aún sin saber si el futuro depara una deriva inevitable o qué es lo que espera al corto-medio plazo del club.

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