Valencia celebró el Día del Medio Ambiente con récord de participación y una llamada a eliminar el plástico de un solo uso

El Área Metropolitana de València celebró el pasado Día Mundial del Medio Ambiente bajo el lema “Sin contaminación por plásticos”, una jornada que se convirtió en mucho más que una efeméride ambiental. La cita, impulsada por la Entidad Metropolitana para el Tratamiento de Residuos (EMTRE), no solo sirvió para concienciar sobre la amenaza que representa el plástico de un solo uso, sino también para mostrar los avances de la ciudadanía y las instituciones en la lucha por un modelo más sostenible y circular.

Según datos de la ONU, se producen más de 400 millones de toneladas de plástico cada año en el mundo, y cerca de la mitad de este material está diseñado para un solo uso. Aún más preocupante es que menos del 10 % del total se recicla de forma efectiva, lo que incrementa la presión sobre ecosistemas naturales y sistemas de gestión de residuos. En el caso de València, la EMTRE alertó de que un 7,18 % de los residuos depositados en el contenedor gris siguen siendo envases ligeros que deberían ir al contenedor amarillo, una cifra que refleja la necesidad de seguir insistiendo en la correcta separación desde el hogar.

Uno de los pilares de esta edición fue el programa EMTREduca, una iniciativa educativa que ha crecido exponencialmente desde su creación. Solo entre enero y mayo de 2025, participaron 24.317 personas en distintas actividades. La distribución geográfica abarcó toda el área metropolitana: Horta Nord aportó 6.868 participantes; Horta Sud, 9.673; y la ciudad de Valencia, 7.776. Este incremento representó un 104 % más de participación en actividades dirigidas al público general en comparación con el mismo periodo de 2024.

"Hemos logrado llegar a más municipios y a un espectro más amplio de la población, ampliando también el tipo de actividades ofertadas. Nuestro objetivo es acercar la educación ambiental a todas las edades y perfiles", explicaron desde la EMTRE. El programa se estructura en más de 20 talleres y actividades gratuitas, adaptadas para escolares, asociaciones, ayuntamientos y público general. Entre ellas, destacan iniciativas como el taller Furoshiki, basado en una técnica tradicional japonesa para reutilizar telas como envoltorios, o Terreta Neta, centrada en la limpieza de espacios naturales.

Las visitas guiadas a instalaciones de tratamiento de residuos, como la planta de Vara-Quart o los ecoparques, también forman parte del programa y han recibido una valoración muy positiva por parte de la ciudadanía. Además, la EMTRE incrementó su presencia en eventos y ferias, con un crecimiento del 565 % respecto a los primeros años del programa, participando en citas como Expociencia, Proava o ferias municipales de medio ambiente y comercio de proximidad.

Paralelamente, se registró un aumento del 103 % en la participación de grupos organizados desde 2022, lo que consolida la tendencia de una mayor implicación ciudadana. "Este tipo de acción organizada nos permite tener un impacto directo sobre colectivos específicos y fomentar una acción transformadora de mayor alcance", señalaron desde la EMTRE.

En cuanto al uso de la red de ecoparques metropolitanos, el balance de los últimos tres años muestra una clara consolidación. Aunque en 2024 los ecoparques estuvieron cerrados casi dos meses debido a la DANA, se logró superar las 90.000 toneladas gestionadas, un incremento del 5,38 % respecto al año anterior. Los residuos más comunes fueron escombros, en gran parte provocados por la propia DANA, seguidos de voluminosos, maderas, colchones y baterías de patinetes. También se mantuvo activo el ecoparque de grandes productores en la planta de los Hornillos, una instalación clave para la recogida de voluminosos por parte de los ayuntamientos.

Un elemento innovador que ha favorecido el uso de estos espacios es la aplicación móvil de la EMTRE, que permite a los usuarios registrados optar a una bonificación de hasta el 25 % en la tasa de tratamiento de residuos, incentivando así el uso responsable del servicio.

Durante la jornada del Día del Medio Ambiente, la EMTRE también presentó las bases de su nuevo Plan de Educación Ambiental Metropolitano (PEAM), que se encuentra en fase de diseño y consulta con ayuntamientos y mancomunidades. El objetivo del PEAM es crear una estrategia educativa realista, efectiva y alineada con las necesidades concretas de los municipios, con una serie de objetivos específicos que buscan multiplicar el impacto de las acciones ya iniciadas.

El nuevo plan incluye propuestas como reforzar la coordinación entre administraciones, ampliar el sistema de evaluación de impacto, incrementar las campañas de proximidad y adaptar los contenidos a diferentes grupos de edad. Entre sus prioridades destacan también la promoción del consumo responsable, la correcta separación de residuos y la comprensión de los procesos e infraestructuras de tratamiento que las administraciones ponen al servicio de la ciudadanía.

"Queremos que la educación ambiental no sea algo puntual, sino una herramienta de cambio constante que llegue a todos los rincones del área metropolitana y que conecte con la vida diaria de las personas", afirmaron los responsables del proyecto. El PEAM busca además establecer contenidos y mensajes vinculados a campañas específicas que tengan una aplicación territorial directa.

El balance general de esta edición del Día del Medio Ambiente ha sido, según los organizadores, altamente positivo. Además de la amplia participación registrada, se ha observado un mayor interés de los medios de comunicación y de las entidades sociales en difundir los mensajes clave del evento. Las redes sociales de la EMTRE también reflejaron un aumento de la interacción ciudadana, consolidando una comunidad virtual que sigue creciendo.

Valencia, con estas cifras y acciones, se posiciona como uno de los referentes en educación ambiental urbana del Mediterráneo. El reto sigue siendo enorme: cambiar hábitos arraigados y construir una cultura del residuo cero. Pero cada paso cuenta, y esta celebración lo demostró. Como indicaron desde la EMTRE: "El objetivo es sencillo pero ambicioso: que cada persona, cada familia y cada escuela forme parte de la solución. Porque solo así lograremos que la sostenibilidad deje de ser una opción para convertirse en una forma de vida".