Las entidades sociales que efectúan una labor de ayuda, acompañamiento y solidaria tan importante necesitan la colaboración de toda la sociedad castellonense para hacer frente al incremento de las atenciones. Cada día son más las personas con necesidades básicas que no pueden llegar a cubrir por los elevados costes de la electricidad o de los alimentos y eso es una muestra de que la crisis económica se ha vuelto a asentar.

Cáritas o el Banco de Alimentos son algunas de las entidades que vienen advirtiendo de la compleja situación que atravesamos y esto se percibe en las atenciones. Y es que el Banco de Alimentos de Castellón cifra en más de uno de cada cuatro castellonenses los que están en situación de pobreza.

Según explica a COPE el presidente del Banco de Alimentos, Santiago Miralles, "para Castellón, sobrepasar el 3% de la población es una exageración y, ahora estamos llegando al 6%. Para nosotros es muchísimo atender a 21.000 personas es complicado" y detalla que "un 27% de personas en la provincia está por debajo del nivel de pobreza".

Perfil de las personas

En los últimos meses las atenciones se han incrementado y son 21.000 personas las que se benefician de la labor de un Banco de Alimentos que también ve como son parejas jóvenes las que necesitan ayuda. "Ayudamos a personas de todas las edades pero, últimamente, lo que más ha aumentado son los matrimonios jóvenes".

Esto es debido a los problemas que está teniendo el sector cerámico y que ha provocado despidos de trabajadores. "Tenemos que ser conscientes y más aquí, que cuando la cerámica comienza a flojear, flojea todo".

Gran Recogida

Ahora el Banco de Alimentos afronta la Gran Recogida que realizará los días 24, 25 y 26 de noviembre y necesita voluntarios para alcanzar los 800 que en tiendas y supermercados colaboran para que las personas muestren su solidaridad y donen productos. Hace falta de todo, pero especialmente leche y aceite.