Jordi Puigneró, vicepresidente de la Generalitat, ha sugerido que una vez ampliado el aeropuerto de El Prat, este se convierta en "el aeropuerto más verde de Europa".

Tras la reunión de la comisión bilateral y los acuerdos a los que llegaron Generalitat y Gobierno, Puigneró cree que hay que ir más allá y trabajar en cuestiones como los combustibles usados o la descarbonización de la movilidad cercana al aeropuerto.

El vicepresidente ha comparado la actual situación de Barcelona, donde hay una restricción de entrada de vehículos contaminantes y la ha utilizado para referirse a un posible modelo que podría aplicarse también en El Prat. Puigneró ha afirmado que la aparición de nuevos combustibles propiciará que puedan tomar decisiones sobre el tipo de aviones que tendrán permitido aterrizar en el aeropuerto.

En referencia a la posible ampliación de una de las pistas, que invadiría un espacio protegido como es el de La Ricarda, el vicepresidente ha reconocido que aún no hay nada acordado dada la falta de redacción de un Plan Director. Aun así, Puigneró ha pedido hacer posible que en El Prat puedan aterrizar vuelos intercontinentales y que este deje de ser un aeropuerto 'low cost' para convertirse en uno de valor añadido.

Puigneró ha sugerido también que las rutas que ofrezca el aeropuerto sean directas, porque cuando la economía catalana "debe viajar a otros puntos del mundo, muy a menudo tiene que hacer escalas, y pierde competitividad". Para el vicepresidente de la Generalitat, que el proyecto dependa de la aprobación de las autoridades europeas será "la mejor garantía de que será un aeropuerto sostenible" y mejor que el que se tiene ahora.