Los obispos valoran el diálogo y la participación en los currículos de Religión

No obstante, en el comunicado emitido por la Conferencia Episcopal Española, lamentan la mínima carga lectiva de la Religión en la LOMLOE

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El presidente de la Comisión Episcopal para la Educación y la Cultura, Alfonso Carrasco Rouco, obispo de Lugo, ha valorado este viernes el diálogo con el Ministerio de Educación y Formación Profesional y como algunas Administraciones educativas en la realización de los currículos de Religión católica de Educación Infantil, de Primaria, de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato.

Esta misma mañana el BOE ha publicado los currículos y el obispo lamenta la mínima carga lectiva de esta asignatura: “Resulta necesaria para dar un contenido concreto a la afirmación de la centralidad de la persona, al pedir una atención real al alumno en su identidad más propia, que implica tener en cuenta su cultura, su lenguaje, su religión, su familia, sus circunstancias particulares”.

Además, expresa que “esta prioridad dada a la persona del alumno nos parece irrenunciable para una comprensión adecuada de la educación, en la que ha de ser posible el reconocimiento de las identidades personales, de la libertad, de la pluralidad de tradiciones y cosmovisiones, así como los aprendizajes necesarios para el diálogo y para la convivencia pacífica”.

Currículo en el contexto pedagógico

“Hacer presente la ERE en el marco competencial delimitado por la LOMLOE —y por la UE— ha implicado la formulación del currículo de Religión católica en continuidad con este contexto pedagógico, algo que no impide, en modo alguno, el desarrollo teológico adecuado a la programación en sus diversas etapas, que está también afirmado e indicado inicialmente”.

En resumen, concluye el obispo presidente de la Comisión: “La clase de Religión juega un papel decisivo para que la escuela pueda cumplir su misión de educación integral del alumnado. Esta convicción es la que ha fundamentado nuestra propuesta al Ministerio y la elaboración del nuevo currículo, en el respeto de todas las exigencias pedagógicas planteadas por la nueva Ley. Creemos necesario compartir estas certezas con los profesores de Religión, con la comunidad educativa y, por supuesto, con las familias. Este nos parece el camino para llegar a dar en el futuro un lugar reconocido comúnmente y estable a la ERE en nuestro sistema educativo, sin depender de los vaivenes de los cambios políticos y del sucederse de las Leyes educativas”.

La Comisión Episcopal asegura que con esta declaración se da por concluido el proceso de elaboración del currículo de Religión Católica de la LOMLOE, en el que destacamos la participación de toda la comunidad educativa, tanto en el Foro “Hacia un currículo de Religión Católica. Un diálogo entre todos y para todos”, como en las diversas consultas realizadas para el diseño de estos currículos.

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