Ilusión y morbo en el regreso del Barça al Camp Nou

Vuelve el Barça al Camp Nou, a casa, casi dos años y medio después. El destino y el ritmo de las obras han querido que el regreso, tanto en Liga como en Champions, sea ante dos rivales con morbo. No pasan las relaciones entre el Barça y el Athletic Club por su mejor momento tras dos veranos de culebrón con Nico Williams como protagonista. Si el futbolista no ha acabado de azulgrana es porque el club no pudo darle garantías de inscripción. El presidente del Athletic, Jon Uriarte, llegó a viajar a Madrid para fiscalizar el fair play del Barça y torpedear el fichaje. Se salió con la suya, el jugador sigue de rojiblanco y visitará el sábado el Camp Nou si la lumbalgia no se lo impide. 

El primer rival en la Champions será el Eintracht de Frankfurt, martes 9 de Diciembre. A pesar de que la normativa UEFA apunta a que toda la fase liga debe jugarse en el mismo estadio el organismo ha accedido a que el Barça pueda trasladarse al Camp Nou en plena competición. La política de pasillos de Laporta y su acercamiento a Ceferin han dado sus frutos. Volverán los alemanes al estadio que invadieron en Abril de 2022. Era semana santa, los seguidores del Eintracht se trasladan en masa y al Barça se le descontroló la venta de entradas. El resultado, 30.000 hinchas alemanes en las gradas del Camp Nou. Además se impusieron 2-3 y eliminaron al Barça de Xavi en los cuartos de final de la Europa League. Lo festejaron por todo lo alto protagonizando una de las noches más vergonzosas que se recuerdan en el estadio. Es de esperar que esta vez el club sepa controlar la situación.

El sábado no habrá afición del Athletic en la grada. El Barça aduce que todavía no ha podido implementar las medidas de seguridad necesarias para aislar a la afición rival. La liga no obliga a dar entradas al equipo visitante. La UEFA sí, un 5% del aforo. Así que de aquí al 9 de Diciembre el Barça deberá tener solucionado el asunto. Las entradas para poder decir yo estuve allí, yo estuve en el regreso al Camp Nou, están disparadas: 199 las más baratas, 589 las más caras. Los poseedores del pase de temporada (24.500 socios) tuvieron que reservar su asiento para el partido antes de saberse que se iba a jugar en el Camp Nou y ante las críticas se ha abierto un nuevo plazo. Hay que recaudar lo máximo posible sin que el socio se sienta ninguneado, complicado ejercicio.