La sede central de Correos en Barcelona se convertirá en un polo para la economía digital con una incubadora de empresas y una oficina de atención al emprendimiento, según se recoge en el protocolo de intenciones que han firmado el Ayuntamiento de Barcelona, Correos y Consorcio de la Zona Franca de Barcelona, que rehabilitará el edificio.

El protocolo se ha firmado en un acto en la sede de Correos en el que han participado el ministro de Transportes, José Luis Ábalos; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; el delegado del Estado para el CZFB, Pere Navarro; el presidente de Correos, Juan Manuel Serrano, y el teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni. El acuerdo contempla que Correos cede el espacio para que lo rehabilite el CZFB y para que el Ayuntamiento use este equipamiento de más de 30.000 metros cuadrados.

La alcaldesa de Barcelona ha sostenido que el proyecto tiene como objetivo "reeconomizar la ciudad" y dar un impulso al centro, muy golpeado por la falta de turistas por el coronavirus. Colau ha señalado la jornada como "casi histórica" por haber puesto de acuerdo a un número destacado de administraciones, y ha celebrado la capacidad de Barcelona para generar proyectos de este tipo.

El ministro Ábalos ha coincidido en elogiar la colaboración interinstitucional y ha afirmado que el acuerdo es una prueba de la "clara apuesta del Gobierno de España por Barcelona". "Un icono en la colaboración entre administración, empresas y emprendedores", ha sostenido el ministro para definir el proyecto, y ha añadido que generará unos 1.500 puestos de trabajo y consolidará a la ciudad como capital digital.

Pere Navarro ha opinado que una iniciativa de este tipo va en la línea de convertir a Barcelona en "la capital de la nueva economía" como, según él, está intentando el evento BNEW que el CZFB organiza esta semana para impulsar la recuperación económica.

El proyecto contempla albergar hasta 150 empresas y startups y un espacio "cívico-cultural" para acoger actividades o necesidades de los vecinos de Ciutat Vella.

A las puertas del edificio donde se ha firmado el protocolo, una veintena de trabajadores de Correos se ha manifestado con el lema de 'Serrano, Correos no se vende' para protestar contra el proyecto.