Los Centros de fauna salvaje (CF) de la Generalitat han atendido durante el 2020 un total de 18.845 animales, según se desprende de los datos de la última Memoria de Centros de Fauna difundidos este lunes por la Conselleria de Territorio y Sostenibilidad.

Esta cifra representa un descenso del 16% de atenciones respecto al 2019, como consecuencia de la pandemia y las limitaciones de movilidad que ha comportado la crisis sanitaria.

El departamento cuenta con siete centros de fauna repartidos por el territorio, de los que cuatro tienen actividades regulares de recuperación y llevan a cabo programas de cría en cautividad: uno en Barcelona, dos en Girona, dos en Lleida y dos en Tarragona.

Estos centros tienen como funciones principales rehabilitar y liberar, "en las mejores condiciones posibles", los ejemplares de las especies autóctonas que ingresan y participar en programas de cría en cautividad de especies amenazadas.

Así, según la Generalitat, los CF son una "herramienta fundamental en la conservación de la biodiversidad", con tareas técnicas, de investigación, de obtención de material científico y de formación, y sensibilización y educación ambiental.

La mayor parte de los ingresos de animales en los CF han estado motivados por caídas de nido (8.739), así como traumatismos por colisiones (2.526), traumatismos de origen desconocido (1.833) y capturas ilegales (1.216), entre otros; la mayoría son pájaros (79%), seguidos de lejos por reptiles (11%) y mamíferos (9%).

En cuanto a la cría en cautividad, se han obtenido cerca de 300 crías de cangrejo de río autóctono, 360 de tortuga mediterránea, 9 de visones europeos y 177 polluelos de aves protegidas y amenazadas, y se ha mantenido un 'stock' de casi 15.000 peces como reservorio para la cría.