El posible cambio de nombre de los barrios Cuatro de Marzo, Girón y 29 de Octubre divide a los vecinos

El concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Valladolid quiere cambiar el nombre de los barrios Cuatro de Marzo y Girón y de la barriada del 29 de Octubre.

A Manuel Saravia no le convencen los argumentos con que en su día se libraron del cambio de nombre, en aplicación de la Ley de Memoria Histórica, y el alcalde, Óscar Puente, se ha mostrado receptivo a estudiar la propuesta de su compañero en el equipo de Gobierno.

El anuncio ha suscitado “mucho interés” en el barrio Girón. Pero también “división de opiniones”, asegura el presidente de la Asociación de Vecinos Valle de Olid, Fernando Polanco.

En su caso, el cambio sería mínimo. Saravia ha puesto sobre la mesa que el barrio pase a denominarse Jirón, con “J” en lugar de con “G”. De este modo se desvincularía de José Antonio Girón de Velasco, quien ocupó, entre otros, el cargo de ministro de Trabajo durante la dictadura franquista.

Polanco ha reconocido en Herrera en COPE Valladolid que Girón es un nombre “muy vinculado al barrio”. “No se asocia para nada a la dictadura”, ha afirmado.

El debate no es nuevo. “Hace algunos años hubo una asamblea”, relata Polanco. Y el tono, recuerda, fue “furibundo”. Hubo quien, ya entonces, entendió como una “agresión al barrio” la posibilidad de cambiarle el nombre.

La “otra” problemática del 29 de Octubre

Las otras dos zonas afectadas por la propuesta de Saravia son el barrio Cuatro de Marzo, que toma su nombre de la fecha de fusión de La Falange con las Juntas de Ofensiva Nacional-Sindicalista (JONS), y la barriada del 29 de Octubre, día en que se fundó Falange Española. En ambos casos la nueva denominación mantendría el mes, pero no el día.

A Sagrario Gil, presidenta de la Asociación de Propietarios del 29 de Octubre, no le convence “nada” el cambio de nombre. “Que se dejen de mandangas”, ha espetado al equipo de Gobierno.

Para Gil es más urgente que el Ayuntamiento de Valladolid de respuesta a “otra problemática” del barrio. Esto es, el narcotráfico y los problemas de convivencia en los que ha derivado. “Creo que esos problemas sí que son para que hagan algo”, ha concluido.