Tres cuartas partes de su capacidad. Es el volumen con el que cuenta actualmente la nave que el Banco de Alimentos tiene en el polígono industrial de Hontoria. Un espacio que sufrió un robo hace poco más de un mes, con la sustracción de alrededor de cinco toneladas de productos, así como de una furgoneta, documentación y material de oficina. Desde entonces, han sido muchas las muestras de solidaridad que han permitido al Banco de Alimentos segoviano mantener una labor que favorece a las familias más necesitadas.

Rufo Sanz es su presidente y agaradece las muestras de cariño y las aportaciones. Asimismo, expresa el deseo de que sea el primero y el último caso de robo en este tipo de entidades. Y es queasegura tener conocimiento de que en alguna otra organización benéfica, los malechores habrían hecho también de las suyas.

Sigue la investigación policial para esclarecer esos hechos, aunque Sanz se muestra convencido de que se dará con los responsables. De hecho, la furgoneta ya ha sido recuperada, algo muy importante para la actividad de la organización, tanto para la recogida de productos como para su reparto. Además, el hecho de que el material estuviera marcado puede favorecer ese rastreo.

Y esas muestras solidarias continúan produciéndose. Un ejemplo es Drylock, que ha donado ocho mil pañales de bebé, de distintas tallas y formatos, al Banco de Alimentos segoviano.