Palencia en nivel de riesgo alto para la salud por altas temperaturas según Sanidad
El mapa de "meteosalud" de Ministerio pinta en rojo la provincia al tener en cuenta otras variables como la edad de la población o la dispersión rural además de la temperatura

Termómetro en 36 grados
Palencia - Publicado el
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El norte de España se prepara para la segunda ola de Calor de este presente verano. Mientras que en el sur llevan ya algunas jornadas viendo el mercurio asciende en los termómetros, hoy en el tercio norte peninsular empieza a notarse el rigor de la meteorología superando ampliamente los 30 grados.
Por ello, desde diferentes ámbitos llegan los pertinentes avisos para protegerse de las posibles consecuencias de esta escalada de temperaturas.
Por ejemplo, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) pinta buena parte del territorio en amarillo y naranja, avisando de que el calor hoy empezara a apretar, pero no es el único ente que pone en alerta a la población.
El Ministerio de Sanidad activa hoy el nivel alto de riesgo en su mapa de "meteorosalud" para la provincia de Palencia, siendo el único territorio en sus dos zonas, que está en máximos de toda la comunidad autónoma.
La diferencia con el anterior deriva de que este último mapa incide especialmente en la salud, teniendo en cuenta otras variables además de la temperatura.
el calor extremo no solo incómoda, también puede ser mortal.
Buena parte del resto de Castilla y León está en nivel de riesgo medio en esta jornada para el Ministerio de Sanidad, sobre todo el interior. (Queda fuera la cantábrica en León-Bierzo-Sanabria-Ibérica de Burgos, Meseta y Sur de Ávila y Segovia en el Sistema central)
Y es que el calor extremo no solo incómoda, también puede ser mortal tal y como reflejan los datos analizados desde el Sistema de Monitorización de la Mortalidad diaria (MoMo) del Instituto de Salud Carlos III.
La primera ola de calor del verano, entre el 28 de junio y el 1 de julio con temperaturas cercanas a los 40 grados, dejó un trágico balance en Castilla y León: 14 personas fallecieron por causas vinculadas a las temperaturas extremas, según el MoMo. Las víctimas fueron en su mayoría mayores de 65 años, especialmente mayores de 85, el grupo más vulnerable frente al calor junto con niños y embarazadas. Este año, desde el inicio del verano climatológico (15 de mayo), son 43 muertes registradas en Castilla y León.
PALENCIA A LA CABEZA EN MUERTES con INFLUENCIA DEL CALOR
La provincia de nuevo más afectada es Palencia, donde se han contabilizado un tercio de las muertes asociadas a altas temperaturas, 15 fallecidos de esas 43 personas. Le siguen en los datos Zamora, con 9 decesos vinculados al calor, 8 en Salamanca, 5 en Ávila y 3 en las provincias de Segovia y Burgos respectivamente.
El impacto del calor extremo no se distribuye de forma homogénea y algunas provincias registran tasas de mortalidad muy superiores a otras. Esto se debe a factores que también se tienen en cuenta para elaborar ese mapa de meteorosalud del ministerio. No solo se han de tener en cuenta temperaturas extremas, sino también envejecimiento poblacional, la dispersión rural o la vulnerabilidad de determinadas zonas ante emergencias sanitarias o climáticas, dependiendo de los medios con los que se cuenten y su proximidad. Un coctel que deja a la provincia "señalada" y encabezando este ranking.
El verano pasado ya dejó cifras preocupantes: 225 personas fallecieron en Castilla y León por causas asociadas a las altas temperaturas. Julio fue, con diferencia, el mes más letal, con 141 decesos, seguido de agosto (84) y septiembre (1).
De ellos, durante la última época estival, se registraron en Palencia 39 fallecimientos, en lo que las altas temperaturas fueron un factor clave. 15 en julio, 23 en agosto y la única persona fallecida por calor en septiembre.
Para combatir estos datos, las autoridades sanitarias insisten en que la mortalidad asociada al calor es, en gran parte, evitable si se siguen las pautas de protección básicas y se refuerza la red de apoyo comunitario, Debe evitarse la exposición al sol en las horas centrales del día y mantener una adecuada hidratación. Se aconseja beber entre 1,5 y 2 litros de agua al día.
Estas medidas se han de tener especialmente en cuenta para:
- Personas mayores.
- Embarazadas y menores de 4 años.
- Personas con enfermedades crónicas.
- Personas que trabajan al aire libre.