La Guardia Civil en el marco de la Operación “ALIYUGO 3” ha identificado y detenido a M.M. (57) e Y.N. (37) como presuntos autores de 18 delitos de hurto al descuido y un delito de robo con fuerza, todos ellos en el interior de vehículos estacionados en áreas de descanso y servicio.

Entre mayo de 2018 y febrero de 2029, coincidiendo con fechas estivales o de mayor trasiego de desplazamientos por el periodo vacacional, se comprobó un repunte de ilícitos bajo esta tipología, recogiendo 19 denuncias.

En estas épocas en que aumentan el número de desplazamientos, las “bandas” actúan sobre vehículos en tránsito por la provincia e intentan pasar desapercibidas entre los muchos conductores que paran a descansar del viaje en estas áreas.

Si bien en el marco del Plan Turismo Seguro puesto en marcha por el Ministerio del Interior, la Comandancia de Burgos refuerza sistemática y periódicamente las vigilancias en estas grandes superficies ubicadas a lo largo de las principales vías de comunicación de la provincia, la rapidez de actuación y las medidas de seguridad que adoptan para no ser descubiertos hace muy complicada su detección.

La experiencia acumulada tras el resultado positivo de otras operaciones llevadas a cabo bajo el mismo modus operandi, hizo pensar en la existencia de un grupo itinerante, organizado y perfectamente coordinado.

La información obtenida tras las denuncias recogidas a los múltiples conductores perjudicados y la investigación posterior ha permitido la identificación, localización y detención de dos varones, integrantes de este grupo no asentado en la provincia y que “operaba” básicamente entre la autovía AP-1 y la N-1, aunque también llevó a cabo ilícitos en la A-1, uno de ellos al sur de la capital burgalesa, lo que da muestras de su movilidad y versatilidad.

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Estas bandas se caracterizan por la presencia de dos o tres personas y cada componente desempeña un determinado rol; en esta ocasión operaban a plena luz de día y buscaban, normalmente, extranjeros en tránsito por nuestras carreteras.

La operación ha sido dirigida por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Burgos; las diligencias instruidas han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción de Miranda de Ebro