No tardamos ni 24 horas después del 18 de septiembre (fecha extendida de este 2022) en tener un balance de actuaciones de la Policía Local de Albacete durante los once días y medio de Feria.

En ese balance de datos, se dio cuenta de las algo más de 1.600 intervenciones, apenas un 6% de incremento con respecto a la última Feria, la de 2019, pero si los visitantes crecieron en un 25% es evidente que los delitos, accidentes y alteraciones del orden no lo hicieron en la misma proporción.

Por cerrar rápido este capítulo, supimos que se incrementaron las denuncias por saltarse la ordenanza cívica, con 72 sanciones por botellones poco numerosos, o que se incrementaron las de drogas, pero bajaron por ejemplo las alcoholemias, los atestados policiales y los accidentes.

Además, las incidencias por los pinchazos fueron 15, de las que 9 acabaron en denuncia, aunque en ninguno de los casos se pudo probar la existencia de sustancia estupefaciente alguna.

Distribución eficiente de recursos

Si 3.119.332, personas, ni una más ni una menos, pasaron en algún momento por el Recinto entre el 7 y ese 18 y ‘solo’ se produjeron ese ‘puñado’ de incidentes se debe a diversos motivos que hemos analizado con el intendente jefe de la Policía Local de la capital.

Pascual Martínez considera que tenemos bien ganada la fama de ciudad segura y eso se debe a factores como la colaboración ciudadana, la presencia de los cuerpos de seguridad en la calle de forma permanente y la coordinación entre ellos cada día y casi a cada hora. Martínez sostiene que “los albaceteños demostramos cada año, y este no ha sido menos, que nos merecemos la Feria que tenemos”.

El intendente explica que es una “auténtica obsesión la labor preventiva, más incluso que la de perseguir el delito o la alteración del orden cuando se produce” lo que pasa es que lo que no se produce es muy difícil de medir y "no somos conscientes de qué situaciones se han evitado por una llamada de teléfono de un ciudadano o por el continuo paseo de los agentes por el entorno de la Feria"

Pero el máximo responsable de la Policía Local de la capital va más allá y nos pone varios ejemplos como las más de 1.000 personas identificadas en controles preventivos, la presencia en horas y lugares de gran aglomeración o la cercanía de los efectivos asignados” Como prueba de estos último tenemos las pocas peleas que se han producido “porque hemos estado tan cerca que la mayoría se han quedado en conatos de pelea y no han pasado a mayores”.

Pascual Martínez presume de que la labor que han realizado los más de 200 agentes del cuerpo que dirige, se ha realizado con turnos más cortos de trabajo “ya que antes eran de doce horas y ahora se han hecho de ocho horas, por lo que podemos decir que se han asignado los recursos de la forma más eficiente posible”.

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Por último y sobre la coordinación, Martínez nos ha indicado en esta entrevista, que con el resto de fuerzas de seguridad el contacto es permanente, pero con el Cuerpo Nacional de Policía, lógicamente, es aún más frecuente y normalmente cada mañana el comisario y yo hablamos y planificamos la jornada”.