El susto que cambió su vida: Patricia, la cántabra que descubrió por casualidad un problema en el corazón

Patricia descubrió por sorpresa que sufría una fibrilación auricular durante un reconocimiento médico rutinario. Tras ser operada, hoy lleva una vida activa y llena de deporte

Día Mundial del Corazón
00:00

Álex García

Santander - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Este lunes se celebra el Día Mundial del Corazón, una jornada que busca recordarnos la importancia de cuidar este órgano incansable que late día y noche para mantenernos vivos. Aunque todos sabemos lo esencial que es, no siempre le prestamos la atención que merece. Alimentación saludable, ejercicio regular y revisiones médicas son los tres pilares básicos para prevenir enfermedades cardiovasculares. Y en una fecha como esta, queremos ponerle voz a lo que significa vivir con un problema de corazón a través del testimonio de Patricia, vecina de Cantabria, que a sus cuarenta y pocos años sufrió una fibrilación auricular

 Un hallazgo inesperado  

Lo curioso de la historia de Patricia es que no notaba síntomas. Se encontraba bien, hacía deporte con normalidad y no sospechaba nada. Fue en un reconocimiento médico de empresa donde saltó la alarma. El electrocardiograma reveló una alteración en el ritmo del corazón, y tras acudir al cardiólogo, llegó el diagnóstico: fibrilación auricular paroxística.

“No es una arritmia constante”, le explicaron, “aparece y desaparece de forma aleatoria”. Eso hacía que fuese aún más difícil de detectar. Patricia recuerda perfectamente la sensación al escuchar que debía someterse a una operación: “Cuando te dicen que tienes algo en el corazón piensas de todo, incluso lo peor. Pero poco a poco entiendes que hay soluciones y que la vida puede seguir adelante”. 

 Una operación que le cambió la vida  

Tras dos intervenciones —la primera en Santander en 2016 y otra en Madrid en 2017—, Patricia pudo estabilizar su situación y retomar su día a día. Reconoce que el proceso le obligó a replantearse hábitos: menos alcohol, más control sobre la alimentación y aprender a escuchar a su propio cuerpo.

Tuvo además la oportunidad de participar en el estudio Predimed, una investigación nacional que analizaba los beneficios de la dieta mediterránea enriquecida con aceite de oliva virgen extra en pacientes operados del corazón. “Cada vez que iba a revisión me daban botellas de aceite como parte del programa. Eso me animaba y, sobre todo, me ayudó a cambiar de forma definitiva mi manera de comer”. 

 Deporte, pero con cabeza  

Patricia nunca ha sido una persona sedentaria. Tenis, golf, bicicleta, remo… la lista de deportes que practica es larga. Por eso, cuando le dijeron que hiciera “vida normal”, ella lo interpretó de la manera más literal posible. Eso sí, con una regla clara: no forzar el corazón.

Ahora sabe cuándo debe bajar el ritmo, cuándo descansar y cuándo es momento de parar. No utiliza pulsómetro porque, en sus palabras, “acababa obsesionada”, pero asegura que nota perfectamente si el corazón late más de la cuenta. “No compito con nadie, solo conmigo misma”, explica. 

 Una experiencia que sirve de aviso  

Lo que más sorprende de su relato es que nunca tuvo grandes síntomas. “Hay gente que nota mareos, palpitaciones o cansancio extremo. Yo nada de eso. Si no llega a ser por el reconocimiento médico, no me entero”. Esa es precisamente la lección que Patricia quiere transmitir en un día como hoy: no esperar a encontrarse mal para hacerse una revisión.

Su testimonio recuerda que los problemas de corazón no siempre avisan. Y que, cuanto antes se detectan, mejor es el pronóstico y más opciones hay de llevar una vida normal. Un mensaje para todos

En este Día Mundial del Corazón, el consejo es claro: cuidar lo que tenemos dentro del pecho es una inversión en calidad de vida. Patricia lo resume de forma sencilla: “No he dejado de hacer deporte ni de vivir como me gusta, simplemente lo hago con cabeza. Cambié algunos hábitos y aprendí a escucharme. Y ahora estoy bien”.

En Cantabria, como en el resto de España, las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la primera causa de mortalidad. Prevenir está en nuestras manos: comer bien, mantenernos activos, controlar el estrés y acudir al médico con regularidad.

El corazón no descansa nunca. Démosle, al menos un día como hoy, la atención que merece.

Temas relacionados

La Linterna

La Linterna

Con Ángel Expósito

Lunes a viernes de 19:00h a 23:30h

Programas

Último boletín

18:00 H | 9 OCT 2025 | BOLETÍN

Boletines COPE
Tracking