La Policía detiene a los "matones" del Casino de Santa Cruz

La Policía Nacional ha detenido a cuatro personas; una mujer de  38 años y sin antecedentes policiales, y tres hombres; de 43, 35 y 35 años con numerosos antecedentes policiales, como presuntos autores de un delito contra la administración de justicia. Los detenidos amenazaron a la víctima, cuando se encontraban reunidos con ésta en el Real Casino de Tenerife, con causarle un mal a su persona y familia, si no retiraba una demanda judicial interpuesta, por una deuda de más de 1.000.000.de euros. La víctima, fue agredida en el lugar por uno de los presentes, contratados por la empresa deudora, para intimidar y amenazar al acreedor.

Los hechos ocurrieron en el mes de noviembre de 2019, desarrollándose en una sala del dicho lugar en el cual, el perjudicado y la mujer denunciada (R.M.S.C de 38 años de edad) habían concertado una reunión para abordar la deuda económica y evitar un proceso judicial.

Puro matonismo 

El perjudicado acudió con su abogado, y la denunciada acudió con tres varones de gran corpulencia física. Iniciada la reunión, dos de estos tres individuos sacaron al abogado de la sala y el tercero golpeó a la víctima, a la vez que la mujer le conminó a que retirara la denuncia o que se atuviera a las consecuencias de no hacerlo. Una vez presentada la denuncia, agentes de la Policía Nacional procedieron a la detención de la denunciada, la cual no declaró en dependencias policiales. Esta circunstancia complicó la identificación de los tres varones que le acompañaron  el día de los hechos.

No obstante, los policías nacionales, tras la práctica de numerosas diligencias de investigación,  lograron  en el mes de enero del presente, la identificación y posterior detención de los tres individuos que acompañaban a la empresaria el día de los hechos denunciados. Los tres detenidos fueron puestos a disposición judicial junto con los atestados tramitados.

Inmediatamente la Junta Directiva del Real Casino, decidió por unanimidad expulsarlos de la institución

Otro polémico caso 

Sin embargo, las empresas de la familia Satyani ha estado involucrado en otras polémicas. La última fue el intento de desahucio de Dolores Rosales, una vecina de Santa Cruz de Tenerife a la que, a sus 91 años, se le instaba a abandonar la vivienda de alquiler en la que lleva desde que tenía ocho. La empresa adquirió el inmueble en 2003, y desde ese momento a pesar de tener la obligación legal de mantenerlo no lo hizo. El contrato de Rosales, de renta antigua, ni siquiera recogía el pago del IBI, hecho que fue aprovechado por la empresa para reclamarle la totalidad de ese impuesto junto con el de la basura de todo el edificio, a pesar de que solo ocupaba la parte alta, y la baja estaba arrendada a un bar. Sin embargo, el Juzgado de Primera Instancia falló a favor de Dolores.