La pubalgia de Álvaro González invita a una reflexión en el Tenerife

El proceso de recuperación de Álvaro González puede marcar una decisión importante en el mercado invernal del CD Tenerife. De alargarse, el fichaje de un central resultaría imprescindible para afrontar la segunda parte de la temporada. Incluso, la baja definitiva del cántabro podría resultar necesaria para liberar una ficha +23. 

Suplente desde la irrupción de José León en el once, González está ahora de baja por unas molestias de pubis que le han impedido estar disponible contra el Granada y el Lugo. Sin embargo, según confirman fuentes de la entidad blanquiazul el problema viene de antes. El jugador ya hizo un esfuerzo para estar disponible en las jornadas anteriores (llegando a infiltrarse), pero la lesión ha ido a peor. De ahí que no tenga horizonte temporal para su vuelta. De hecho, el cuerpo técnico no le espera antes del parón navideño.

“Se hizo una prueba el otro día y de momento está parado. Tenemos que ver si sigue tratamiento o tiene que parar”, explicó Álvaro Cervera en la previa del duelo de Copa del Rey. En la misma respuesta quiso dejar claro que “su ausencia en los últimos partidos no tiene que ver con esta lesión, jugaba otro compañero y ya. Lo del pubis (el empeoramiento) ha sido de unos días para acá”.

Esa repentina molestia, incómoda para cualquier futbolista y sin un periodo de recuperación claro, deja al Tenerife casi en cuadro en el centro de la defensa. Solo tiene dos efectivos en esa demarcación y, uno de ellos (Landázuri), acumula ya tres tarjetas amarillas. Si fuera amonestado en los dos próximos partidos sería baja ya el 4 de enero. Para ese día debería estar inscrito Facundo Agüero, algo que confirmó Felipe Miñambres en Deportes Cope Tenerife hace menos de un mes.

Pero la necesidad sería doble si Álvaro González no pudiera estar disponible pronto. El propio jugador, después de una dilatada carrera y sin el protagonismo que le gustaría, también tendrá margen para tomar una decisión. Porque la suplencia no gusta a nadie, pero a un veterano que hace un esfuerzo para unirse a un proyecto como el del Tenerife en Primera RFEF, aún menos.

De ahí que la reflexión sea necesaria entre todas las partes para escoger la mejor opción. No es descartable una salida del central de Potes en el mercado de enero. En ese caso, el club añadiría una tarea más a las que ya tiene definidas para este mes. La orden que ha llegado desde la cúpula a la dirección deportiva es la de mejorar la plantilla en lo que sea necesario, atendiendo las necesidades del cuerpo técnico. Guill y Cervera tendrán la palabra. Habrá fichajes y, como consecuencia, salidas. Toca sentarse a poner nombres.