Aunque a menudo suelen pasar desapercibidas para el gran público, las rondallas juegan un papel imprescindible en el Carnaval de Santa Cruz de Tenerife, hasta el punto de ser su "componente diferenciador". Así lo resume Gara Fierro, directora desde 2019 de Gran Tinerfe.

Fierro debutó ese año como solista en el concurso, para asumir la dirección meses después y estrenarse en 2020. Ella destaca cómo "es curioso hablar con compañeros de otros lugares, incluso en Gran Canaria, y ver que les llama poderosamente la atención lo que hacemos aquí con las rondallas, porque esto no existe en otros carnavales".

A pesar de ello, asume que, "en general, falta poner en valor la lírica en el Carnaval, y no solo las rondallas". Aunque ella es joven, recuerda la trayectoria de Gran Tinerfe, que cumple 30 años este 2021, si bien su precedente hay que buscarlo en Tronco Verde. "Gran Tinerfe se fundó para que no muriera este tipo de concursos", algo que han conseguido.

De hecho, agradece la evolución de las rondallas en estos años: "Se han ido adaptando a las nuevas corrientes y estilos. Que haya un tema libre permite demostrar otras cosas sin alejarse, eso sí, de las raíces de las rondallas". También destaca la nueva concha acústica del Auditorio de Tenerife para la celebración del concurso: "Le da otra sonoridad y es un sitio adecuado tanto para las cuerdas como para las voces".