El drama de trabajar y ser desahuciado: la lucha de una familia con seis hijos, que tendrá que abandonar su casa por una deuda de 6.000 euros
Moisés y Raquel, padres de seis menores, se enfrentan a un desalojo inminente y no encuentran un alquiler asequible para su familia
Canarias - Publicado el
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Comienza una semana crucial para Moisés y Raquel, una pareja con seis hijos menores a su cargo que podría quedarse en la calle este mismo jueves. La familia, residente en Ingenio (Gran Canaria), se enfrenta a una orden de desahucio fijada para el 13 de noviembre a las diez de la mañana, una situación límite que llega tras el incumplimiento de promesas por parte de la administración y una larga batalla judicial.
Una deuda de 6.000 euros originada en la pandemia
El origen de este drama se remonta a la pandemia de la COVID-19, cuando Moisés perdió su empleo y dejó de pagar la hipoteca durante un año. Aunque más tarde encontró un nuevo trabajo e intentó reanudar los pagos, descubrió que su casa había sido vendida a un fondo buitre por una deuda que ascendía a solo 6.000 euros.
Raquel, su mujer, ha expresado la angustia que vive la familia: "Yo lo que busco realmente es un techo para mis hijos, no tengo dónde ir, solo tengo un vehículo y no vamos a estar ocho personas en un coche". Su principal temor es el impacto que esta situación pueda tener sobre los pequeños.
Lo que busco realmente es un techo para mis hijos, no tengo dónde ir"
Madre afectada
La paradoja: trabajar y no ser considerado vulnerable
A pesar de la dramática situación, el juzgado considera que la familia no se encuentra en situación de vulnerabilidad porque el padre tiene un empleo. Sin embargo, la abogada de la familia, Isabel Saavedra, de la asociación Derecho al Techo, cuestiona este criterio, argumentando que con los elevados precios del alquiler en Canarias, un salario no es suficiente para mantener a una familia de ocho miembros.
Actualmente, tanto Moisés como Raquel trabajan en la misma cadena de supermercados. A pesar de contar con dos sueldos y una pequeña pensión, encontrar una vivienda de alquiler se ha convertido en una misión imposible. "Le dices que tienes hijos y ya se echan para atrás y te dicen que no alquilan vivienda para niños", lamenta Moisés.
Yo no estoy pidiendo nada regalado"
Padre afectado
Una cuenta atrás llena de angustia
Moisés no pide caridad, sino una oportunidad para mantener a su familia bajo un techo. "Yo no estoy pidiendo nada regalado", ha afirmado con rotundidad. "Consíganme una casa y díganme: ‘Moisés, tienes que pagar 700, 800 euros’. Y me voy de cabeza".
La desesperación aumenta a medida que se acerca la fecha del desahucio. El padre ha confesado que apenas duerme y no sabe dónde irá con su familia si el desalojo se ejecuta. El mayor de sus miedos es que Asuntos Sociales le retire la custodia de sus hijos. "Me los tienen que quitar por culpa de ustedes, porque a la gente que lo necesita no le dan una vivienda", sentencia con impotencia.
Para añadir más cinismo a la situación, el fondo de inversión que ahora es propietario de la casa le ofrece la posibilidad de recuperarla por 137.000 euros, a pesar de que la misma vivienda aparece anunciada en portales inmobiliarios por 127.000 euros. Moisés compró esta casa en 2006 y pagó su hipoteca durante trece años, un hogar donde ha criado a sus hijos y que ahora está a punto de perder.
Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.