El rector da por zanjada la polémica por el traslado de Minas

El rector de la Universidad de Oviedo, Ignacio Villaverde, ha dado este viernes por zanjada la polémica que mantiene el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, en relación con el traslado de la Escuela de Ingeniería de Minas a la Escuela Politécnica de Mieres.

En declaraciones a los periodistas tras las entregas de las medallas de oro de la Universidad de Oviedo, Villaverde ha subrayado que la institución académica que dirige está ahora en otras cuestiones que "en perder el tiempo en otras cosas que no conducen a nada" mientras que el alcalde rechaza la decisión adoptada por el Consejo de Gobierno universitario para proceder al traslado de la Escuela de Minas al campus de Mieres, un acuerdo que el primer edil aún espera poder frenar.

"Es un tema que doy por zanjado, creo que la Universidad ha hecho lo que tenía que hacer y espero estar a la altura de la misión que Asturias espera de nosotros para situar a la institución en los grandes escenarios universitarios y seguir en esa senda para que sea un referente y una cabeza tractora de la región", ha recalcado.

En relación a la oferta del Ministerio de Sanidad para el aumento de alumnos en el primer curso de Medicina, Villaverde ha indicado que se debería alcanzar "un gran acuerdo" con los ministerios de Universidad y Sanidad y con la Consejería de Salud, con la que ya se ha puesto en contacto, para tratar este plan que "ya está muy avanzado" y descifrar la capacidad de la Universidad para aumentar estas plazas.

Por otra parte, el rector ha manifestado que la celebración de hoy supone "un día feliz" para la institución que dirige al honrar y distinguir a estas personalidades universitarias de la región que han demostrado su compromiso y el espíritu universitario.

En el acto han sido reconocidos con la medalla de oro de la Universidad los últimos tres exrectores, Juan Vázquez, Vicente Gotor y Santiago García; los expresidentes del Consejo Social Alicia Castro Masaveu y Ladislao Azcona; los profesores Ana Isabel Fernández Álvarez, Carlos López-Otín, Julio Bobes García y Luis Fernández-Vega, y a título póstumo, el lingüista Emilio Alarcos.

En su discurso, Villaverde ha señalado que la Universidad ha sido "una comunidad entregada al conocimiento, a su custodia como bien social, a su uso como la más formidable herramienta para hacer de este mundo el mejor de los posibles".

En representación de los exrectores, Vázquez ha manifestado su preocupación por el "mercantilismos del conocimiento" al que se está llegando en la actualidad y ha apostado por llevar a la Universidad "en la buena dirección de la meritocracia del mundo académico".