La Policía Nacional encontró a uno de los residentes vagando solo por la calle y a otro en el suelo por haberse caído de la cama, y nadie para prestar auxilio. El asunto se está investigando. Pero, al parecer, casos similares se dan con más frecuencia de lo que imaginamos.
La Oficina del Defensor del Anciano en Asturias, alerta de que en muchos casos una sola persona tiene que atender instalaciones de hasta tres plantas, en las que hay personas con importantes minusvalías físicas y psíquicas, sin que ni Principado ni Ayuntamientos muestren interés en que se realicen inspecciones de forma correcta.
La familia de los usuarios no llega a denunciar, salvo en casos extremos, por miedo a venganzas sobre los residentes. Para la Asociación sería necesario dotar de cámaras de vigilancia a todos los geriátricos, tanto públicos como privados. Servicios Sociales espera recibir el atestado policial para abrir el expediente sancionador que proceda.