Gracias a la cierta reactivación que llegó en el ultimo cuatrimestre del año pasado y merced también a los ERTES, la provincia de Sevilla consiguió amortiguar en parte el desastre laboral que trae consigo la crisis generada por la pandemia.

Los datos de la EPA indican que el año se cerró con un saldo de 12.100 desempleados más , de los que la mayoría – 9800- son mujeres , elevando la cifra total a 208.000 sevillanos en paro. Asimismo Sevilla pierde casi 29.900 puestos de trabajo (también la mayor parte mujeres, 23.500), hasta un total de 718.900 personas, dejando una tasa de paro del 22,4%.

El analisis de las cifras deja bien claro cuales son los sectores mas afectados por la situación de crisis, que obviamente son aquellos que tienen que ver con la movilidad y las relaciones sociales , es decir , hostelería, ocio y principalmente todo lo relacionado con el turismo que es nuestro verdadwero motor económico; baste decir que en el año que acaba de terminar se han perdido 37.100 puestos trabajo en las empresas de Servicios sevillanas, con una caída del 6,3%.

Sin embargo otros sectores de nuestra economía no solo no han destrudio empleo sino que han saldado el año creando empleo. La agricultura por ejemplo pierde solo un centenar de empleos , en cambio la industria gana 6.000 con un crecimiento laboral del 7,7% y tambien el balance es positivo en la construccion que cierra 2020 con 1.500 trabajadores más que hace un año, lo que representa un incremento del 3,6%.

Los sindicatos UGT y CCOO han señalado que la ampliación de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) y el resto de medidas contempladas en el denominado escudo social son "esenciales" para el mantenimiento del tejido productivo en la provincia, y subrayan también que la crisis laboral derivada de la Covid-19 está "condenando", especialmente, a las mujeres sevillanas que soportan el 78% de la caída de la ocupación con respecto al año anterior en la provincia.

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