El joven estudiante de 15 años de Sevilla que ha logrado una beca única: “Mucha ilusión”

Con solo 15 años, Nicolás Alonso Pardal, estudiante del Colegio Internacional de Sevilla - San Francisco de Paula, se ha convertido en el único sevillano seleccionado este curso por United World Colleges (UWC) para cursar los dos años del Programa del Diploma del Bachillerato Internacional en el UWC Maastrich, en Países Bajos.

“Tenía mucha ilusión por cursar mi etapa preuniversitaria en un colegio de este perfil, en un país ajeno a España y una gran oferta educativa. Estoy muy agradecido por esta oportunidad. Para mí, formar parte de los Colegios del Mundo Unido no solo es un reto académico, sino la posibilidad de aprender de otras culturas, convivir con personas de todo el mundo y aportar mi granito de arena para construir un mundo más justo y comprensivo”, ha explicado Nicolás, que afronta esta nueva etapa con entusiasmo.

El joven sevillano, además, ha compartido su visión sobre lo que más le ilusiona de esta experiencia: “Para mí, esta oportunidad es un sueño al que llevo aspirando desde hace muchísimo tiempo. Van a ser dos años conviviendo con personas de todo el mundo, compartiendo tradiciones, experiencias, idiomas y gastronomías. Pero, sobre todo, lo que más me atrae es aprender y entender puntos de vista de personas con ideologías, religiones y tradiciones completamente opuestas a las mías. Creo que ese es un enriquecimiento necesario para tener una mente verdaderamente abierta”.

La organización UWC agrupa 18 centros en cuatro continentes, entre ellos el conocido UWC Atlantic de Gales, y cada año selecciona a más de 12.000 estudiantes de todo el mundo por su excelencia académica y valores personales. Desde el Colegio Internacional San Francisco de Paula subrayan que esta beca reconoce no solo el rendimiento académico de Nicolás, sino también su madurez personal, creatividad, compromiso social y curiosidad intelectual.

El proceso de selección, que se desarrolló entre septiembre y marzo, incluyó tests culturales, psicológicos, entrevistas y la presentación de proyectos personales.

En cuanto a su futuro universitario, Nicolás lo tiene claro: “Ahora mismo, yo tengo claro que de mayor, me dedique a lo que me dedique, quiero crear un impacto positivo en las personas, ya sean de mi comunidad, de mi país o del mundo. Y digo esto de verdad, no porque suene bonito. Porque de verdad quiero que el tiempo que dedique sea útil para resolver problemas y mejorar la vida de cuantas más personas posibles. Para ello, me gustaría estudiar una carrera universitaria relacionada con las ciencias de la gestión y la ingeniería. Más adelante, me gustaría formarme específicamente en gestión estratégica y desarrollo de negocio, algo que me llama muchísimo la atención”.

Mientras se prepara para marcharse en agosto a Maastrich, Nicolás confiesa que echará de menos a sus compañeros, profesores y la gastronomía sevillana, aunque espera poder regresar a Sevilla para disfrutar de la Feria. Su historia se convierte en un ejemplo de talento joven y vocación internacional, con la vista puesta en transformar la sociedad desde el conocimiento y el compromiso personal.