La Fundación Corinto amplía su red de hermandades para dar de comer a 800 personas al mes en Málaga

La Fundación Corinto de Málaga sigue ampliando su red de colaboración para ayudar a las familias más vulnerables. La organización cuenta desde la semana pasada con un nuevo presidente, Javier Martín, y suma ya 32 cofradías colaboradoras con la reciente intención de la Hermandad de la Sagrada Cena de incorporarse al patronato.

Un economato para los más necesitados

La fundación gestiona un economato social en la zona de Capuchinos que funciona como "un supermercado puro y duro", según explica Martín. En este establecimiento, los usuarios pagan solo el 25 % del coste del producto, mientras que el 75 % restante lo abona la hermandad que ha derivado a la familia.

Si un producto cuesta un euro, el usuario va a pagar 25 céntimos y 75 céntimos los paga la hermandad"

Javier Martín

Presidente

Ganas de ayudar, el principal requisito

Para formar parte de la fundación, el principal requisito es simple y directo: “Tener ganas, muchas, de ayudar al prójimo”, afirma su presidente. Además de esta voluntad, las hermandades deben aportar una cuota, facilitar voluntarios y participar en el plan de acogida para asegurar que la ayuda llega a quienes realmente lo necesitan, personas cuyos ingresos no les permiten hacer la compra.

Tener ganas, muchas, de ayudar al prójimo"

Javier Martín

Presidente

Casi 3.000 asistencias en 2024

El impacto de esta labor es notable. Mensualmente, la Fundación Corinto atiende a unas 215 familias, lo que se traduce en aproximadamente 800 personas beneficiadas. Solo en lo que va de 2024, se han realizado cerca de 2.600 asistencias. Todo ello es posible gracias al compromiso de 140 voluntarios que, según Martín, son la pieza clave: "Sin ellos es imposible dar el servicio a todas estas personas".

La Hermandad de la Sagrada Cena ha sido la última en manifestar su intención de unirse, siguiendo el proceso que ya inició la Pollinica. Javier Martín, quien releva en la presidencia a Álvaro Guardiola, asume el cargo para continuar con la misión que la fundación mantiene intacta desde su creación en 2011: echar una mano a las familias vulnerables de Málaga.