Un parking solar impulsa la inclusión y la sostenibilidad en la Cuenca Minera de Huelva

La Fundación Atalaya, responsable de la acción social de Atalaya Mining, y la Asociación Protectora de Personas con Discapacidad de la Cuenca Minera (Aspromin) han renovado su convenio de colaboración. El acuerdo, firmado el año pasado, permitirá la construcción de un parking solar en las instalaciones que Aspromin gestiona en El Campillo (Huelva), un proyecto en el que también colaboran otras entidades como la Fundación ONCE.

Un proyecto con triple impacto

La construcción del parking solar, que ya ha comenzado y se espera que finalice a finales de este año, abarcará una superficie de 2.000 metros cuadrados. La instalación contará con 60 plazas de aparcamiento techadas con placas solares que generarán 150 kW de potencia máxima. Además de resolver las actuales deficiencias de estacionamiento, la estructura ha sido diseñada para ser completamente accesible para personas con movilidad reducida.

La energía limpia generada se destinará al autoconsumo de las instalaciones, lo que supondrá un ahorro del 60% anual en la factura energética y facilitará la sostenibilidad económica de la entidad. Este proyecto se alinea con la estrategia de Sostenibilidad de Atalaya y su compromiso con el ODS 13 - Acción por el Clima, ya que reducirá las emisiones de carbono en 180 toneladas al año.

Una alianza consolidada

Esta iniciativa se enmarca en un acuerdo estratégico de cuatro años entre ambas entidades, centrado en desarrollar acciones sociales para mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual. La colaboración entre la Fundación Atalaya y Aspromin se remonta a 2017 y ha incluido diversas acciones, como el mantenimiento del Centro de Día Ocupacional de Aspromin como proveedor exclusivo de productos de carpintería para la operación minera.

Contribuir a que cada persona con discapacidad y su familia puedan realizar su proyecto de calidad de vida"

Aspromin, fundada en 1969, es una entidad sin ánimo de lucro declarada de utilidad pública. Su misión es “contribuir, desde su compromiso ético, con apoyos y oportunidades, a que cada persona con discapacidad intelectual o del desarrollo y su familia puedan realizar su proyecto de calidad de vida, así como a promover su inclusión como ciudadana de pleno derecho”. La asociación atiende a 102 usuarios en régimen de internado y a 287 en sus centros de atención infantil temprana.