“Se trata de uno de los objetivos marcados para los cien primeros días de la nueva legislatura y pretende conseguir un impulso decidido a los sectores estratégicos sobre los que la Junta tiene competencias, es decir, sobre agricultura, ganadería, pesca, agroindustria y desarrollo rural”, ha señalado Salvador, quien ha establecido como ejes de este plan estratégico “la mejora de la seguridad, la estabilidad y las oportunidades de negocio que exigen el actual y el futuro mercado, que requieren un diálogo constante y fluido con todas las partes implicadas en el mismo”. 

Según ha argumentado Salvador, Granada cuenta con un sector agrícola y ganadero altamente competitivos que han sido responsables de que la provincia gane peso en el sector agrario andaluz y nacional y que su agroindustria haya sido capaz de adaptarse a las nuevas tendencias en el consumo, de reorientar su acción hacia productos de mayor impacto en los mercados y de consolidarse gracias a su apuesta por la innovación y la diferenciación en el mercado global.

“Actualmente, el sector agroalimentario es uno de los principales motores de la economía granadina y constituye un motor de primera magnitud en la estructura productiva andaluza”, ha indicado el portavoz de Cs, quien ha desgranado que este plan estratégico contemplará no solo la mejora de la competitividad, sino también el fomento de la investigación y la innovación tecnológica, el impulso de la formación y la capacitación de los productores y el apoyo al relevo generacional mediante iniciativas como la reducción y simplificación de los trámites administrativos y la mejora de la gestión de las ayudas, el aumento de la interlocución de la administración con los sectores y la dinamización e impulso de la economía en zonas rurales. 

Salvador ha incidido en que nos encontramos en un momento clave para el sector agroalimentario y pesquero en Granada, donde ambos deberán prepararse para afrontar importantes retos de futuro, ser más competitivos en un mundo cada vez más globalizado y satisfacer una mayor demanda de alimentos con unos recursos naturales limitados que requieren de protección. 

“Consideramos esencial la participación de los agricultores, ganaderos, pescadores y de los agentes económicos y sociales en la elaboración de este plan integral, que debe avanzar hacia una mayor aplicación de las nuevas tecnologías en la producción y comercialización de los productos”, ha concluido Salvador.