La microbiota intestinal, clave para predecir recaídas cardíacas: un modelo pionero desde Córdoba

Un equipo multidisciplinar de investigadores cordobeses ha logrado un importante avance en medicina personalizada al desarrollar un modelo matemático capaz de predecir el riesgo de recurrencia cardiovascular a partir del análisis de la microbiota intestinal. El hallazgo, publicado en la revista científica European Heart Journal, supone un paso decisivo hacia tratamientos más personalizados y eficaces para quienes ya han sufrido un evento cardíaco.

El proyecto ha sido desarrollado por el Grupo ‘Nutrigenómica. Síndrome Metabólico’ del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (Imibic), en colaboración con el Hospital Universitario Reina Sofía, la Universidad de Córdoba (UCO) y el Ciber de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición. Para construir este modelo predictivo, los investigadores han empleado técnicas de secuenciación masiva de ADN sobre muestras fecales recogidas en el ensayo clínico Cordioprev, el mayor estudio hasta la fecha sobre prevención secundaria cardiovascular, que ha seguido durante siete años a cientos de pacientes.

La investigación ha comparado la composición de la microbiota intestinal de pacientes que sufrieron nuevos episodios cardiovasculares con la de aquellos que no volvieron a padecerlos. Los resultados apuntan a que ciertas alteraciones en la microbiota, así como el deterioro de la barrera intestinal, pueden estar implicados en procesos inflamatorios que aumentan el riesgo de recaídas cardíacas.

"Contar con herramientas que permitan identificar de manera más precisa a los pacientes con mayor probabilidad de sufrir nuevos eventos es crucial para optimizar y personalizar los tratamientos", explica a COPE el doctor en Bioquímica e investigador del grupo. "Hoy por hoy, las estrategias predictivas siguen siendo limitadas, y este modelo abre una vía prometedora".

La microbiota intestinal —el conjunto de microorganismos que habitan el intestino humano— ha ganado protagonismo en la investigación biomédica por su papel en múltiples procesos de salud y enfermedad. En el caso de las patologías cardiovasculares, ya existía evidencia de su influencia, pero esta es la primera vez que se vincula directamente su perfil con el riesgo de nuevos episodios en pacientes ya diagnosticados.

Según Antonio Camargo, este modelo representa “un avance significativo que podría transformar el enfoque actual de la medicina personalizada. Incorporar el análisis de la microbiota como herramienta de predicción puede permitirnos adaptar los tratamientos antes de que se produzca una recaída, actuando de forma más temprana y eficaz”.

También destaca la relevancia del hallazgo en un contexto de gran impacto sanitario: “La enfermedad cardiovascular sigue siendo la principal causa de muerte en el mundo. Aunque los tratamientos han mejorado, los pacientes que han sufrido un infarto u otro evento grave siguen teniendo un riesgo muy elevado de recaer. Si somos capaces de anticiparnos, reduciremos esa incidencia y mejoraremos la calidad de vida”.

Este estudio representa un ejemplo del potencial de la investigación local para aportar soluciones globales a problemas de salud pública. Además, refuerza el papel del Imibic, el Hospital Reina Sofía y la Universidad de Córdoba como centros de referencia en el desarrollo de estrategias innovadoras dentro del ámbito de la prevención cardiovascular.

El siguiente paso será validar este modelo en otros grupos poblacionales y explorar intervenciones que puedan modificar la microbiota de forma beneficiosa. Así, este avance no solo se queda en la predicción, sino que abre la puerta a nuevas formas de prevención personalizada basadas en la salud intestinal.