El ajedrez eleva el cociente intelectual, ayuda a prevenir el Alzheimer, ejercita ambos hemiferios cerebrales, mejora la creatividad, potencia la memoria, ayuda a resolvedr problemas, incrementa la capacidad lectora, facilita la concentración, hace crecer las denominadas dendritas (estructuras de las neuronas implicadas en la recpción de estímulos) y enseña a planificar y hacer previsiones. Es todo un dechado de oportunidades para todos que, al nivel que nos permitan nuestras capacidades personales, es más que recomendable por sus muchos e interesantes beneficios.

Pero también es exigente con quien lo practica. Hay que ser un verdadero apasionado al ajedrez, tener confianza en sí mismo, ser aficionado a la literatura ajedrecista, saber aprender de las derrotas, ser buen perdedor, saber adaptarse a los ritmos de juego, ser capaz de superar la tensión, ser un luchador, practicar con frecuencia y tener capacidad de concentración. Parece lógico pensar que, muy por delante de todo ello, es preciso tener una gran capacidad de observación del tablero, de la colocación de las piezas propias y del contendiente, de las actitudes de aquél contra el que jugamos...

Por tanto, y pese a los muchos beneficios que tiene, ¿pueden practicarlo las personas sin visión? La primera impresión es que, sin ello, difícilmente pueden ponerse en liza todas las demás exigencias que acabamos de mencionar. ¿O sí? Lo cierto es que desde este martes 17 de noviembre y hasta el día 23 de este mismo mes es posible comprobarlo. Los mejores ajedrecistas ciegos de España están disputando estos días en la localidad San Fernando (Cádiz) el Campeonato de España individual organizado por la Federación Española de Deportes para Ciegos (FEDC).

26 jugadores están compitiendo en el Hotel Bahía Sur en siete rondas con presencia de hasta diez andaluces, seis de ellos gaditanos, entre los que se encuentra el tercer clasificado del año pasado, José Manuel Vela. También asistirán otros favoritos como el balear Alejandro Martínez o el tinerfeño Valeriano Septién. El campeonato se desarrollará bajo un estricto protocolo sanitario para evitar cualquier tipo de contagio por el Covid-19. Los jugadores participantes se han realizado test serológicos previos al viaje a tierras andaluzas, y deberán llevar mascarilla en todo momento a la vez que guardar la distancia de seguridad.

Las partidas se jugarán en dos tableros, pudiendo cada ajedrecista llevar al suyo propio o utilizar alguno de la organización. Estos tableros, las piezas y los relojes serán desinfectados después de cada ronda de juego. El torneo se disputará por sistema suizo, con un ritmo de juego de 90 minutos por jugador, más un incremento de 30 segundos por jugada. Los 4 primeros clasificados en este Campeonato de España obtendrán plaza directa para el Europeo Individual de Serbia que está aplazado para 2021.

El ajedrez es un deporte de larga tradición entre las personas con discapacidad visual, por su facilidad para ser practicado de forma integrada en las competiciones con personas videntes. Para la práctica del ajedrez, los ciegos necesitan sólo algunas adaptaciones en el material de juego. Por ejemplo, el tablero tiene los cuadros negros ligeramente más altos que los blancos para hacerlos diferentes al tacto. Además, las piezas negras llevan, en su parte superior, una protuberancia que las distingue de las blancas.

Cada casilla del tablero tiene un orificio en el centro, en el que se insertan las piezas a través de un pequeño vástago que éstas tienen en su parte inferior. Mediante este sistema, las manos del jugador pueden tocar todas las piezas sin derribarlas. Las partidas entre ajedrecistas ciegos se juegan en dos tableros. Cada uno de los jugadores mueve las piezas en su tablero de modo que, al tocarlas, no moleste ni sea molestado por su contrario. Los relojes de ajedrez disponen de un mecanismo de voz con auriculares para acceder al tiempo de juego.