El error que cometes cada vez que cueces pasta y que puede arruinar tu plato: no sirve de nada

Una costumbre extendida en muchas cocinas es añadir un chorro de aceite al agua de cocción de la pasta con la intención de evitar que se pegue. 

Sin embargo, expertos en gastronomía y divulgadores científicos coinciden en que esta práctica no solo es ineficaz, sino que puede afectar negativamente al resultado final del plato.

¿Por qué no funciona el aceite?  

El cocinero y divulgador Heinz Wuth, conocido en redes sociales como @soycienciaycocina, explica que el aceite es una sustancia hidrofóbica, es decir, no se mezcla con el agua. 

Además, es menos denso que el agua, por lo que se queda flotando en la superficie, mientras que la pasta, al ser más pesada, permanece en el fondo de la olla. Por mucho que se agite el agua, el aceite y la pasta rara vez entran en contacto durante la cocción.

La razón por la que la pasta se pega no está relacionada con la falta de aceite, sino con el almidón que libera durante la cocción. Este almidón se libera en el agua y puede hacer que la pasta se adhiera entre sí si no se remueve adecuadamente. 

La única forma efectiva de evitar que se peguen es remover con frecuencia durante los primeros minutos de cocción. El movimiento y las burbujas de ebullición ayudan a evitar que se adhieran, como señala Wuth en uno de sus vídeos.

 Recomendaciones de los chefs  

El chef alemán Steffen Henssler también desaconseja añadir aceite al agua de la pasta. En sus vídeos en redes sociales, advierte que el aceite solo flota en la superficie y, cuando se escurre la pasta, este la recubre e impide que se mezcle bien con la salsa. 

Para él, este es "el error número uno" al cocinar pasta, y anima a desterrar esta práctica de una vez por todas.

Aunque no se recomienda usar aceite durante la cocción, añadir un poco de aceite después de escurrir la pasta puede ser útil si se va a guardar para utilizarla más tarde. El aceite puede ayudar a evitar que la pasta se seque o se adhiera entre sí durante el almacenamiento. 

Sin embargo, es importante tener en cuenta que este paso no sustituye la necesidad de remover la pasta durante la cocción para evitar que se pegue.

Por lo tanto, añadir aceite al agua de cocción de la pasta es una práctica común, pero ineficaz. Para evitar que la pasta se pegue, lo más efectivo es removerla con frecuencia durante los primeros minutos de cocción. Esta técnica sencilla y comprobada asegura que la pasta se cocine de manera uniforme y se mezcle bien con la salsa, mejorando el resultado final del plato.