La cantante polaca de 13 años Roksana Węgiel consiguió este domingo alzarse con la victoria en el festival de Eurovisión Junior que se celebró este domingo en Minsk (Bielorrusia). Polonia consigue así su primer triunfo en el certamen "de peques" que imita al senior y que este año ha dado un salto cualitativo a nivel de producción y también de participación, puesto que hasta 20 países han participado en esta edición. Un récord obtenido gracias a los debuts de Kazajistán y Gales y regresos tan esperados como el de Francia, que a punto estuvo de llevarse el trofeo.

Roksana Węgiel se alzó con el triunfo gracias al tema "Anyone I Want to Be" y el apoyo de la votación popular, puesto que el jurado la había dejado en una posición muy discreta.  Australia, Malta y Georgia fueron las favoritas de los jurados, que después se hundieron con el televoto. Francia, que también estuvo poco valorada por los expertos, obtuvo la medalla de plata gracias a la divertida actuación de Angélina y su "Jamais Sans Toi".

Por primera vez, el país ganador tendrá la oportunidad de ser la sede del festival el próximo año. La delegación polaca ya ha avanzado su interés por acoger el certamen, aunque se descarta que sea su capital Varsovia la que finalmente ejerza de anfitriona. Si la UER acepta su propuesta, el festival junior viajará a Polonia el próximo año. En caso contrario, cualquier otro país podría recibir dicha invitación. Rusia, que este año ha obtenido su peor resultado histórico (sólo fue décima), ya ha mostrado su interés por acoger el festival infantil por primera vez tras varias intentonas.