La directora general del Instituto de la Juventud (Injuve), María Teresa Pérez, cree que la "estigmatización" que están sufriendo los jóvenes durante la pandemia es "injusta", "cala y hace daño" a una juventud que se siente "marginada" y sirve de "caldo de cultivo" para futuros problemas de salud mental.

Unas consideraciones que ha realizado este jueves durante la jornada organizada por el Injuve y la Red para la Promoción de la Salud Mental y el Bienestar Emocional en los Adolescentes (Red Proema) para analizar el impacto psicológico de la covid-19 en niños y adolescentes.

Pérez ha lamentado que los problemas de salud mental sigan estando "bastante invisibilizados", sobre todo cuando afectan a los jóvenes, a los que la pandemia ha puesto "ante una prueba muy dura" puesto que elementos determinantes en esa etapa vital como las relaciones sociales y la educación se han visto muy "tocados".

A esa circunstancia se une, según ha advertido la directora general del Injuve, el "señalamiento social" que están sufriendo los jóvenes "por ser supuestamente culpables" de transmitir el coronavirus con sus actitudes.

"Esta estigmatización es injusta y sirve de coartada a algunos para desviar la mirada de otros asuntos como la falta de personal sanitario. Ese estigma, a pesar de lo injusto, cala y hace daño a una juventud que ya se siente instrumentalizada y marginada por esta sociedad y es un caldo de cultivo muy peligroso para futuros problemas de salud mental", ha alertado.

En este sentido, Pérez ha remarcado que los datos de depresión en este colectivo, incluso de suicidio, "son muy alarmantes" y ha subrayado que la situación de incertidumbre actual generada por la pandemia influye negativamente.

Por ello, ha abogado por que las instituciones se "dejen la piel" en proteger y en reforzar los servicios públicos y hagan "lo que haga falta" para mejorar las condiciones de vida de la juventud y ha insistido en la importancia de extender la red de cuidados públicos hacia la prevención.

"Hay que visibilizar las problemas mentales para poder prevenirlos y combatirlos. Es fundamental que se hagan políticas públicas, la mejor receta para prevenir problemas mentales es la inversión y la protección social", ha concluido.