Así es la 'Bóveda del Fin del Mundo': El lugar donde el hombre no puede poner un pie

La Bóveda Global de Semillas de Svalbard ubicada en el Ártico, atesora la mayor colección de seguridad de semillas del mundo. Solo se abre dos o tres veces al año

ctv-hlp-8008294392001w

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

El planeta, desde hace un tiempo, lleva preparándose para un hipotético desastre a nivel mundial. Por ello, en el año 2006 comenzó a construirse un espacio en el que almacenar semillas de todo tipo como salvaguarda de todas las especies de plantas que hay en el planeta. En total hay 22.000 semillas depositadas en su interior, destinadas a ese hipotético escenario en el que se produjera una hecatombe mundial.

Este banco de semillas abrió sus puertas en 2008 y atesora en su interior más de un millón de muestras, procedentes de unos 90 depositarios, entre países y centros internacionales de conservación. Se guardan para hacer frente, en caso de necesidad, a los desafíos planteados por el cambio climático y otras posibles amenazas globales que se nos pongan delante. La Bóveda se abre tres o cuatro veces al año y está previsto que el envío español llegue allí para la apertura que se realizará la primera semana de junio.

España ya tiene todo listo para hacer su primera contribución. 1.111 bolsas de aluminio que custodian más de un millar de variedades de semillas que representan lo fundamental del patrimonio vegetal español. 1.080 variedades que ya están listas para incorporarse, por primera vez, al “arca de Noé” de Svalbard, en Noruega.

Se pretende conservar estas semillas, por si alguna de las especies desapareciese como consecuencia de una catástrofe natural o una guerra, poder replicarlas. En su interior, cuenta con más de un millón de muestras de semillas, convirtiéndose en el depósito más grande del mundo. La construcción está situada a más de mil kilómetros del Polo Norte y a 130 metros por encima del nivel del mar.

Gracias a la capa de suelo bajo la superficie terrestre, el Permafrost, constantemente congelada que rodea toda la bóveda, es el lugar ideal para preservar las semillas de su interior. Además, debido a la ausencia de actividad sísmica, se convierte en una zona todavía más segura. No obstante, aunque las semillas se trasladaron de la forma más segura en 2008, no existe ninguna manera de comprobar que sigan en perfecto estado. Se supone que la bóveda está tan bien protegida, que es capaz de mantener la calidad de las semillas y que estas puedan sobrevivir durante miles de años, si hiciese falta.

Aunque, últimamente ha habido cierta preocupación por parte de algunos científicos. Estos recalcan el aumento progresivo de las temperaturas que estamos padeciendo, ha hecho que el Permafrost se esté deshelando. Durante el verano del 2020, un equipo de investigadores noruegos reportó la época más cálida de la zona desde que comenzaron los registros hace varios años.

¿Por qué no se puede entrar?

En la actualidad, el 40% de las calorías consumidas por el ser humano proceden de tan solo 3 cultivos principales: maíz, trigo y arroz. Pese a ello, en el mundo se solían cultivar más de 6.000 plantas diferentes, hoy encapsuladas en esta apocalíptica bóveda para sobrevivir en caso de desastre.

Su entrada está cerrada al público debido a lo vital que es mantener y preservar el desarrollo de estas plantas, por lo que, evitar la acción humana al máximo posible resulta fundamental. La entrada al interior está prohibida, salvo las dos o tres veces que los encargados tienen permitido acceder para reponer semillas, administrar algún cuidado o simplemente comprobar que todo está en su sitio.

Herrera en COPE

Herrera en COPE

Con Carlos Herrera

Lunes a viernes de 06:00h a 13:00h

Programas

Último boletín

05:00H | 19 MAY 2025 | BOLETÍN

Boletines COPE
Tracking